Luis Suárez: “la llama del fútbol se va apagando de a poco”

Con sus 37 años, Luis Suárez, máximo goleador histórico de la Selección Uruguaya cumplió su partido número 140 con la Celeste el pasado lunes ante Estados Unidos, y de cara al duelo de cuartos de final ante Brasil se mostró feliz por estar viviendo este momento aunque también admitió que la llama del fútbol se va apagando: “Estoy disfrutando mucho cada momento, porque es algo que, con la edad que tengo y a medida que te hacés más grande, lo disfrutás con mayor intensidad. La llama del fútbol se va apagando de a poco, y estar disfrutando de este momento, con este grupo, es maravilloso. La gente quizás ve de afuera al Suárez de tantos partidos, tantos goles, los años que pasaron, pero soy uno más. Acepto todo tipo de jodas sin ningún problema, porque me gusta que mis compañeros sean así, que no estén cohibidos con nada. Es la forma de romper el hielo. Jugar o no es el rol que toca y estoy feliz de hacer mi parte, siempre intentando ayudar en lo que pueda al plantel”.

Sobre su sucesor, Darwin Núñez, contó que “Trato de ayudarlo todo lo que pueda. Estuve en ese lugar, y con su edad, y sé lo importante que es tener referentes, como fueron para mí el Loco Abreu o Diego Forlán, que eran ídolos y los primeros en apoyarme, respaldarme y darme ánimo. Hoy, estando en ese rol, espero que sea una motivación para él, ayudarlo a que sea la referencia de ataque y siga a este nivel, porque Uruguay puede llegar muy lejos”.

Consultado sobre la denominada “Zona Suárez”, aquella definición del Cholo Simeone en Atlético de Madrid y que marca su aparición goleadora en los momentos clave: “Es una frase que quedó marcada de esa época, que me gusta, queda linda, y por momentos se ha cumplido. Espero que en esta Copa no aparezca, porque quiere decir que Uruguay va bien y no es necesario recurrir a ello. Ahora, si se llega a necesitar, ahí estaremos, porque algún capítulo más espero escribir con la selección. Con 37 años, volver a jugar otra Copa y que mis hijos, ya más grandes, me vean jugando, es maravilloso. En 2011, el sueño de mi hija era que su padre fuera campeón de América. No hay nada más lindo que tu familia tenga esa ilusión y se lo comente al plantel. Tenemos que jugar con esas ganas y asumir la responsabilidad de estar representando a nuestro país”.