Mirta Vanni, la primera piloto agrícola del mundo, es uruguaya

Mirta Vanni de Barbot, nacida en la Ciudad de Carmelo, Colonia, en enero de 1924, es un gran referente uruguaya en campo de la aeronáutica de nuestro país.

Vivió en Carmelo, donde comenzó su atracción por los aviones. Todos los días Mirta se dirigía al campo de aviación para ver volar un avión muy particular de una persona del pueblo; lo cual le fue generando la ilusión de poder volar algún día.

Tras el fallecimiento de su padre, con 13 años parte a Montevideo junto a su madre sin saber que ese era el camino para convertirse en la primer piloto mujer del Uruguay. Estudio el liceo en la capital mientras realizaba diferentes cursos que le permitieran trabajar. En 1941 con la llegada de la guerra se postulo como voluntaria del estado donde surgió un curso de enfermera de avión. 

Con el paso del tiempo, comenzaron a brindar becas para aquellas personas que estuviesen interesadas en continuar su formación académica; con 16 años Mirta Vanni se inscribe en el Curso de Piloto Amateur que se dictaba en el Aeroclub. Seguido, continuo su formación como piloto profesional, siendo la primera mujer en realizarlo, así como el curso de mecánica aeronáutica; formación que decide tomar viendo la problemática de que ninguno de sus compañeros sabia resolver cotidianeidades con las aeronaves, desde cosas sencillas como cambios de aceite o arreglar bujías.

En 1943 recibió el Brevet Profesional Clase B que la dejaba habilitada para pilotar profesionalmente. Un año después “PLUNA” hizo un llamado para pilotos profesionales y Mirta se presentó. Con 19 años contaba con licencia, pero las brechas de género que existían en esa época no permitieron que formara parte de la tripulación.

Una desgracia con suerte fue que en el país se vivía una gran invasión de langosta, y el estado compro tres aviones de fumigación que necesitarían de pilotos calificados para volar. Era toda una novedad ya que no se conocían ese tipo de aviones y Mirta vio la oportunidad para empezar su carrera profesional presentándose en el Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca.

El servicio del Ministerio comenzó a crecer y con el Mirta Vanni quien fue nombrada directora.  A su vez, fue quien mandó a crear los hangares para los aviones en Melilla. También en una ocasión, se debían de trasladar aviones de Estados Unidos a Uruguay siendo muy peligroso colocarlos en barcos y con tiempos acotados, fue Mirta quien propuso irlos a buscar y traerlos volando, una experiencia inolvidable para la piloto.

Dentro de sus experiencias, también traslado a quien en ese entonces se encontraba al frente del Ministerio, Wilson Ferreira, desde Montevideo hasta Rocha, donde el ministro tenia un campo. Persona que la apoyo en su carrera enviándola a Nueva Zelanda a especializarse en técnicas de fumigación.

En 1952, protagonizo los primeros vuelos experimentales de fertilización y siembra en el país, en 1959, con un equipo de fumigación formado (donde participaban tres mujeres más), debido a las inesperadas y más graves inundaciones en nuestro país, se encargaron del rescate, evacuaciones y traslados de medicamentos.

Mirta Vanni fue quien se encargó de adquirir 10 fumigadores, convirtiéndose en la primer clienta extranjera del Embraer Ipanema, formado el Servicio Aéreo de la cartera. Dicho avión se convirtió hasta la actualidad en el más vendido y que aún se produce.

Dentro de sus reconocimientos a nivel nacional e internacional, coordinó el Curso de Piloto Agrícola y representó a Uruguay, por esta especialidad, en países como Nueva Zelanda, Australia, Canadá, Estados Unidos, Holanda, Francia, Reino Unido, Costa Rica y Jamaica.

Su carrera continuó hasta 1985, con 43 años de trabajo y más de 7000 horas de vuelo, se retiró de la actividad oficial. Ha recibido múltiples condecoraciones, premios y homenajes en Uruguay, Argentina, Brasil y Estados Unidos por su aporte al desarrollo de la aviación latinoamericana.

Mirta Vanni ha demostrado que el cielo no tiene límites y que las mujeres pueden desempeñarse con éxito en cualquier campo, incluso en aquellos dominados tradicionalmente por hombres. Su historia inspira a muchas jóvenes a seguir sus sueños, a luchar por lo que desean y a creer en sí mismas, sin importar los obstáculos que puedan encontrar en el camino.

3 Comentarios

  1. En 1979 tuve la oportunidad de conocerla , la vida me brindo una oportunidad de trabajo en el MGAP , ella fue mi Directora en Servicios Agricolas, persona y jefa con mayúscula.
    L

  2. Que belleza aprender tanto desde lejos,estamos en Atlanta GA .Lejos del pasito pero aprendiendo de él. GRACIAS Valeria por nutrirnos de conocimientos.

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