Hablamos de una mujer de acción, artista reconocida, cantante norteamericana, pasando por los servicios secretos de la resistencia Francesa con los que colaboro durante la Guerra; madre de 12 hijos adoptivos de diferentes etnias; con los que buscaba tener una «tribu de arcoíris» cuando aún no teniamos idea de usar este estandarte. Una verdadera referente de los años 20.
Josephine Baker
Freda Josephine MacDonald nace en Saint Louis un 3 de junio de 1906. Criada por su madre ya que su padre los habia abandonado, tuvo una infancia cruel, donde dormir en la calle o sobre cartones y hurgar en la basura para poder comer era algo cotidiano.
Comenzó a trabajar a los 8 años como empleada de un hogar donde sufria maltrato y después como camarera, a los 14 contrajo matrimonio dos veces donde obtuvo el apellido Baker. En esa época decide dedicarse a la danza con el proposito de evadir el frio y peligro de las calles, ya que en Saint Louis se vivia el pero período de racismo de la historia.
En 1922 se unió a una compañía de baile; un año más tarde ya estaba en el coro de la primera obra de color que se representó en Broadway, «Shuffle Along». Se trasladó a Nueva York, donde trabajó en el Cotton Club y finalmente viajó a París, la ciudad en la que le darían la fama y el reconocimiento que ella buscaba. Formó parte del Folies Bergere, allí debutó con el espectáculo La Revue Nègre, un show en el que Baker llevaba a cabo su “baile de las bananas” (apodado así porque vestía una falda hecha de 16 bananas).
En poco tiempo se convirtió en una auténtica estrella del espectáculo parisino con sus actuaciones a medio camino entre el humor y el exotismo, y que hundían sus raíces en la cultura del jazz.
Años más tarde volvería a los Estados Unidos donde se vuelve casar en 1947 con el director de orquesta Joe Bouillon.
En una lucha constante por los derechos de las personas afrodescendientes, tuvo muchas complicaciones a la hora de presentar sus espectáculos en diferentes ciudades de Estados Unidos, ya que no siempre se le permitía que blancos y negros compartieran el mismo establecimiento. La reacción de Baker, era cancelar sus shows y reunirse con la gente que si estuviese a favor de la igualdad en las calles. Por este tipo de acontecimientos fue declarada persona «non grata» en este país.
Con la imposibilidad de tener hijos, decidió junto a Joe Bouillon adoptar 12 niños, y pasarían a nombrarse a ellos mismos «La tribu arcoíris». Todos eran de distintas razas, nacionalidades y credos. Uno de sus hijos, Jean Claude, relata en un entrevista: «Enseguida nos dimos cuenta de que no éramos como todo el mundo. Que todos éramos muy diferentes y que la nuestra no era una madre normal. Por ejemplo, la acompañamos en muchos viajes por el mundo y pudimos conocer al Papa Pablo VI en Roma, a Fidel Castro en Cuba o al mariscal Tito en Yugoslavia. Gracias a su capacidad de mostrar esa fraternidad con el mundo entero, la recibían en todos esos países y le abrían casi todas las puertas. Ella siempre nos decía que un día nos devolvería a nuestros países de origen. Y a partir de ese momento nos dimos cuenta de que era una madre diferente al resto de las madres”.
La adopción ya existía, pero no las personas a las cuales les interesase tener una multitud de hijos de etnias completamente diferentes. Josephine, siempre quiso demostrar que se puede coexistir, siempre y cuando uno quiera hacerlo y también que no solo es madre aquella que tiene un hijo, sino aquella que brinda amor, refugio, educación y apoyo.
Con el estallido de la II Guerra Mundial, se alistó como voluntaria y fue miembro de la resistencia francesa. Este hecho le valió la Legión de Honor , que le fue concedida en los años 60, también participó en la marcha por Martin Luther King, Jr de Washington y luchó intensamente contra el racismo y por romper las convenciones de género .
En 1975, Josephine entró en coma y murió el 12 de abril por una hemorragia cerebral. El funeral tuvo lugar en París y convirtió a Baker en la primera mujer americana a la que le otorgaron honores militares en Francia. Sus restos descansan en Mónaco.
Una mujer que a su manera fue logrando cada una de las cosas que se proponía en el camino y acompañando en su crecimiento a 12 personas que en el futuro iban a ver todo de una manera diferente, gracias a lo inculcado por su madre, que aunque no fuese la biologica, supo brindar el amor que neceesitaban. Hoy se celebra el día de la madre en Uruguay, y por ello quisimos traer a Josephine Baker, ejemplo de que en cada mujer existe