Tenía 93 años y estaba condenado a nueve cadenas perpetuas por delitos de lesa humanidad que incluyen secuestros, asesinatos, torturas, desapariciones y robo de bebés.
En un documento, la renovación planteó desde el título del “aporte a la discusión de la militancia socialista” que “es imprescindible frenar la caída libre del PS para fortalecer al Frente Amplio.
“El Partido no expulsó ni sancionó a ningún/a compañero/a por desconocer resoluciones partidarias vinculadas a los temas que generaron polémica interna”, acotó el secretario general del PS, diputado Gonzalo Civila a la hora de rendir cuentas ante el Congreso.