El 30 de enero del año pasado, la Policía detuvo al entonces jugador de la Premier e internacional inglés en medio de la investigación de las acusaciones de agresión y violación por parte de su novia Harriet Robson. Robson publicó en redes sociales unas imágenes de ella llena de moratones y golpes, sangrando en la cara y denunciando el trato recibido por Greenwood. Los cargos contra el delantero de 21 años, que fue apartado de inmediato por el United, se conocieron en octubre: intento de violación, conducta controladora y agresión.
Un años después, este jueves, La jefa de asuntos sociales de la Policía de Mánchester, Michaela Kerr, anunció en un comunicado el fin del procedimiento legal contra Greenwood, una decisión que dijo «no se ha tomado a la ligera», recordando el compromiso policial de investigar las denuncias de violencia contra las mujeres y niñas y apoyando a las afectadas.