Crisis Humanitaria en Gaza: La Desesperación por el Agua y la Ayuda
Actualmente, solo el 40% de las instalaciones de producción de agua potable en Gaza están operativas, lo que equivale a 87 de 217. Sin combustible, todas ellas dejarán de funcionar en cuestión de semanas, lo que agrava una situación ya crítica.
Desde que se cortó el suministro eléctrico a Gaza tras los devastadores ataques del 7 de octubre de 2023, el combustible se ha vuelto esencial para la producción, tratamiento y distribución de agua a más de dos millones de palestinos. “Negar el combustible no solo corta el suministro; corta la supervivencia”, enfatizó Elder, un representante de una organización humanitaria.
La situación en Gaza se asemeja a una sequía provocada, con sistemas de agua colapsando bajo presión. “Dado que es provocada, se puede detener. No existen problemas logísticos o técnicos; es un problema político, y si hay voluntad, podría resolverse de la noche a la mañana”, añadió Elder. La comunidad palestina ha aprendido a vivir sin muchas cosas, pero el agua es un recurso indispensable. “No podemos sobrevivir días sin agua”, subrayó.
Elder también destacó que este es el momento más crítico desde que “esta guerra contra los niños comenzó”. La crisis del agua está íntimamente relacionada con la malnutrición, creando un ciclo letal. Desde principios de año, más de 110 niños han sido ingresados diariamente para recibir tratamiento por malnutrición, una cifra que representa a aquellos que tienen la suerte de llegar a un hospital; muchos otros han muerto sin poder acceder a atención médica.
Además, la crisis del agua está impulsando brotes de enfermedades infecciosas como hepatitis A y B, en un contexto en el que los hospitales enfrentan un colapso debido a la falta de combustible. La ayuda humanitaria se está desvaneciendo; la matanza diaria de niños en Gaza no se registra, y ahora una crisis deliberada de combustible está privando a los palestinos de lo más esencial para su supervivencia: el agua.
“A principios de este mes, un amigo de Gaza me dijo: ‘Hemos aprendido a vivir sin muchas cosas. Sin nuestras casas, sin seguridad, sin seres queridos… pero no podemos vivir sin comida’”, compartió Elder. Esta semana, su amigo agregó: “Hemos aprendido a vivir sin muchas cosas. Sin nuestros hogares; sin seguridad; sin seres queridos…
incluso hemos aprendido que podemos sobrevivir sin comida durante una semana, o más… pero no podemos vivir días sin agua”.
La falta de equidad en la distribución de ayuda es alarmante. Elder explicó que los hospitales, aunque parcialmente destruidos, como el Complejo Médico Nasser de Jan Yunis, continúan tratando a niños heridos, a pesar de la escasez crítica de medicamentos y suministros médicos. “Conocí a un niño herido por un proyectil de tanque en uno de estos campamentos; me enteré de que ese niño había fallecido desde entonces a causa de esas heridas”, relató Elder.
La grave escasez de recursos básicos para la vida, combinada con las restricciones impuestas por Israel, está creando desesperación y hambruna en toda Gaza. Este viernes, al menos 44 palestinos perdieron la vida en ataques israelíes, muchos de ellos mientras intentaban obtener alimentos. Según el Ministerio de Sanidad de Gaza, 25 personas fallecieron por fuego israelí mientras esperaban camiones de ayuda al sur de Netzarim.
UNICEF ha denunciado que la fundación controlada por Estados Unidos e Israel está “empeorando una situación desesperada”. Los más vulnerables a la falta de agua potable, alimentos y combustible son los gazatíes más débiles: los jóvenes, las mujeres embarazadas, los ancianos y los amputados.
Elder relató una conversación conmovedora con una abuela que lloraba y preguntaba: “¿Cómo voy a llegar a estos sitios?” También mencionó a jóvenes que han intentado siete veces conseguir ayuda y nunca han regresado con nada.
La falta total de equidad en la distribución de ayuda es abrumadora. “No se puede distribuir ayuda en una zona militarizada, en una zona de combate, por parte de una de las partes del conflicto”, concluyó Elder, reflejando una realidad desgarradora en la que la supervivencia se convierte en una lucha diaria en Gaza.
Insistimos en que Uruguay debe dar un ejemplo y traer un grupo.de jóvenes a uruguay sin esperar ya Es posible que otros gobiernos lo imiten
POR QUE NO TRAEN A TODOS LOS PALESTINOS AL URUGUAY SERIA UNA BUENA OBRA