“Sin salud mental no hay salud”. Dijo el filósofo chino Lao Tzu para referirse enorme impacto que tiene la salud mental en el bienestar psicológico de las personas, según la Organización Mundial para la Salud (OMS) la salud mental es un estado de bienestar en el cual el individuo es consciente de sus propias capacidades, puede afrontar las tensiones normales de la vida, puede trabajar de forma productiva y fructífera y es capaz de hacer una contribución a su comunidad.
Estudios realizados hace unos años por la OMS calculan que el 25% de las personas padecen uno o más trastornos mentales o del comportamiento a lo largo de su vida y el 22% de la población de América Latina y el Caribe presentan trastornos mentales y neurológicos siendo la depresión la más presente en los habitantes de la región.
Pero lo más alarmante es que el 60 y 65% de las personas que necesitan tratamiento por depresión no reciben la atención adecuada.
En Uruguay según la Organización Panamericana de la Salud en el año 2021 Uruguay alcanzó la tasa más alta de suicidios de la que se tiene registro: 21.39 cada 100.000 habitantes, a pesar de la Ley N° 19529 de Salud Mental que entró en vigencia en el 2018 que busca mejorar esta condición en el país.
En el último año hubo 2.896 intentos de autoeliminación. Además, hay una «tendencia de ascenso» del suicidio en adolescentes, según datos que presentó la ministra de Salud Pública Karina Rando, quien comentó que las cifras más altas de fallecimientos se dan en los mayores del grupo etario, pero también hay muertes en los más chicos.
En septiembre de 2023 el Ministerio de Salud Pública se reunió con mutualistas con la intención que estas incorporen nuevas prestaciones a sus servicios así como informar sobre la implementación del Plan de Salud Mental que llevará adelante el gobierno.
Pero el escenario de los prestadores de salud es más complejo con el tema, ya que acusan un déficit anual de US$ 7 millones actualmente con las prestaciones de salud mental que se brindan, según una entrevista al representante de la Coordinadora Nacional de Instituciones de Asistencia Médica Colectiva ante la Junta Nacional de Salud (Junasa), Daniel Porcaro, desde el año 2011, perciben fondos extras por las prestaciones de salud mental, que suman un total de US$ 13 millones.
Sin embargo, Porcaro acotó que los costos directos de personal y fármacos asociados suponen US$ 20 millones anuales, según sus cálculos realizados este año.
El colectivo de los familiares de personas con trastornos mentales en Uruguay mencionan que luchan por una mejor atención de la salud mental de sus familiares dentro del Sistema Nacional Integrado de Salud (SNIS) y un cambio en el paradigma ya que tienen muchas respuestas sin constatar y en el interior del país la atención es más precaria.
Un informe presentado por el Ministerio de Desarrollo Social, muestra una situación de deterioro progresivo que se viene dando en nuestro país en materia de bienestar y salud mental. Evidencia que muchos jóvenes y adolescentes se sienten tristes o desesperanzados al punto de dejar de hacer sus actividades habituales.