Ucrania y Rusia habían alcanzado un principio de acuerdo para firmar un tratado de paz en marzo de 2022, unos días después del estallido de la guerra, pero la estrategia fue frustrada por las potencias occidentales, afirmó este miércoles Vladimir Medinski, uno de los principales asesores del presidente ruso, Vladimir Putin.
«Rusia, no con palabras, sino con hechos, estaba lista para una solución pacífica; además, Kiev estaba, por lo general, cerca de tal solución, pero aquel acuerdo no convenía en absoluto a los socios de Ucrania en Occidente, que perturbaron el proceso de negociación», manifestó Medinski.
El asesor presidencial ejerció además como jefe de la delegación rusa encargada de negociar la paz con Ucrania durante los primeros meses del conflicto, cuando las partes llegaron a celebrar varias reuniones para acercar posturas en territorio de Bielorrusia y también en Turquía.
De hecho, en uno de los encuentros en Turquía los representantes rusos y ucranianos rubricaron un acuerdo titulado Tratado de Neutralidad Permanente y Garantías de Seguridad de Ucrania, que fijaba una serie de condiciones para el cese de las hostilidades, según la agencia de noticias rusa TASS.