La atención de toda la comunidad internacional estaba atraída al encuentro de alto nivel del BRICS que se celebró del 22 al 24 de agosto del a.c. en la ciudad sudafricana de Johannesburgo. BRICS es una organización interestatal actualmente integrada por Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica, que fue fundada en 2006 en el transcurso del Foro Económico Internacional de San Petersburgo. La población de sus Estados miembros equivale a más del 40% de los habitantes del planeta, mientras que el territorio común supera el 25% del mundial. Además, los BRICS representan un gran poder económico: de acuerdo con las evaluaciones de los expertos, en 2023 las economías del grupo (en paridad del poder adquisitivo) representan el 31.5% del PIB global. En comparación este indicador en el Grupo de los Siete (G7) ha disminuido hasta 30%.
La Cumbre de Johannesburgo incluyó la sesión “Outreach/BRICS Plus” con participación de más de 60 jefes de diferentes Estados y organizaciones internacionales. Este evento fue la etapa decisiva en el camino de consolidación del BRICS como uno de los mecanismos claves de la gobernanza global, plataforma para promover los intereses de los países en vías de desarrollo e instrumento para fortalecer el papel de los Estados no occidentales en formación del nuevo mundo multipolar.
La delegación de la Federación de Rusia que participó en la XV Cumbre del BRICS en formato presencial fue encabezada por el Ministro de Asuntos Exteriores Serguéi Lavrov. En vísperas del evento el Canciller ruso publicó el artículo “El BRICS: rumbo a un orden mundial justo”, en que destacó las tendencias globales y el papel de esta organización en la formación del nuevo orden mundial. En particular subrayó lo siguiente: “Símbolo de una auténtica multipolaridad, ejemplo de una comunicación interestatal honesta son las actividades de asociaciones como el BRICS. En el marco de la misma los Estados con diferentes sistemas políticos, plataformas de valores autóctonos, política exterior independiente interaccionan con eficiencia en diferentes campos”.
Uno de los momentos clave de la Cumbre fue el discurso en el formato virtual del Presidente de Rusia Vladimir Putin. El mandatario ruso expresó que los BRICS están unánimemente a favor de la formación de un orden mundial multipolar verdaderamente justo y basado en el derecho internacional, respetando los principios clave de la Carta de la ONU, incluido el derecho soberano y el respeto al derecho de cada nación a su propio modelo de desarrollo. Al mismo tiempo fue subrayado que los integrantes del grupo están en contra de cualquier tipo de hegemonía propagada por algunos países con su excepcionalísimo, no aceptan la política de continuación del colonialismo y el neocolonialismo. Hablando de las perspectivas del desarrollo del BRICS Vladimir Putin recalcó que la Estrategia de Asociación Económica de los Estados miembros hasta 2025 se aplica con éxito, haciendo hincapié en tales áreas, como la diversificación de las cadenas de suministro, la desdolarización y la transición a las monedas nacionales en las transacciones mutuas, la economía digital, el apoyo a las pequeñas y medianas empresas y la transferencia justa de tecnologías. En este sentido, cabe destacar que el volumen de comercio de Rusia con los socios de BRICS aumentó últimamente en 40,5% hasta un récord de más de 230 mil millones de dólares.
Durante la Cumbre se tomaron varias decisiones del gran significado para el futuro de todo el sistema de relaciones internacionales: seis Estados – Argentina, Irán, Arabia Saudita, Etiopía, Egipto y los Emiratos Árabes Unidos – fueron invitados a ser nuevos miembros plenos del BRICS a partir del 1 de enero de 2024. Este hito histórico significa que el bloque tras su ampliación representará el 46% de la población del planeta y el 37% del PIB mundial. El Canciller ruso Serguéi Lavrov destacó que las posiciones del BRICS en el Grupo de los Veinte se reforzarán, porque tanto Arabia Saudí como Argentina (junto con los miembros fundadores del BRICS) también forman parte del G20. Es importante mencionar que la lista de los interesados en participar en el BRICS está integrada por 15 Estados más, inclusive tres países latinoamericanos: Venezuela, México y Bolivia (las cuestiones de la nueva posible ampliación del grupo se considerarán más tarde). Por lo tanto, la adhesión de nuevos miembros al BRICS, así como un gran número de los Estados, que quieren desarrollar la cooperación con BRICS, es una evidencia clara de que el mundo emergente está cansado del dominio del Occidente y su política de doble rasero.
En la Cumbre del BRICS fue aprobada la Declaración de Johannesburgo, en la cual se confirmó el compromiso de trabajar por una recuperación económica fuerte, sostenible, equilibrada e inclusiva, la eliminación de barreras comerciales, el apoyo de la representación de los países en vías de desarrollo en la ONU y su Consejo de Seguridad. Con satisfacción se tomó nota de las propuestas pertinentes de mediación y buenos oficios destinados a una resolución pacífica del conflicto ucraniano mediante el diálogo y la diplomacia.
En general la XV Cumbre del BRICS fue un paso importante hacia la consolidación del nuevo modelo justo de relaciones internacionales, manifestando la voluntad de una gran parte de los países a defender su soberanía, reforzar la interacción económica a base de igualdad, respeto mutuo y consideración de intereses de cada uno de los integrantes. El Presidente de Rusia Vladimir Putin felicitó a nuevos integrantes del bloque, asegurando que el trabajo para ampliar la influencia del BRICS continuará, inclusive en el marco de la próxima reunión de alto nivel del grupo que se celebrará en octubre de 2024 en la ciudad rusa de Kazán. Durante su Presidencia Pro Tempore en el BRICS el año que viene Rusia seguirá trabajando para fortalecer el papel de la organización en el mundo, cooperar con los nuevos miembros del Grupo y fomentar sus valores básicos.
Y nosotros cuando nos integramos a este grupo?