En una extensa sesión, y en el marco de una sesión extraordinaria, el plenario de la Cámara de Diputados discutió la aprobación del proyecto de ley de Corresponsabilidad en la Crianza, iniciativa que fue suspendida en su tratamiento en la semana pasada para ser tratada ayer en una maratónica sesión en el Parlamento. Tras diversas negociaciones, la mayoría de los partidos de la coalición alcanzaron un acuerdo para tener las 50 voluntades necesarias para aprobar el documento.
Durante varias horas, legisladores del Frente Amplio, Partido Nacional, Partido Colorado, Partido Independiente y Cabildo Abierto estuvieron defendiendo y cuestionando tanto el contenido del proyecto como especialmente el artículo Nº 4, el cual ha generado diversos debates y cuestionamientos entre la izquierda y los partidos que integran la coalición de gobierno. Dicho artículo habilita a que se mantengan las visitas pese a que el denunciante tenga medidas cautelares.
Pero una de las razones por las cuales fue avanzando la hora y no se votaba, fue porque legisladores del Frente Amplio explicaron que en la mañana de este miércoles, recibieron vía WhatsApp, un mensaje del diputado del Partido Nacional, Alfonso Lereté, con un mensaje en el que les expresaba que había cambios en el proyecto que iba a ser tratado posteriormente en la sesión en Diputados. Esto originó la crítica y cuestionamiento de los diputados frenteamplistas para con el trato que consideraban que la coalición tuvo para con la fuerza política que integran.
La diputada frenteamplista Claudia Hugo, durante su intervención en el Plenario, dijo que “Pocos minutos antes de comenzar la sesión, recibimos a través del coordinador de bancada un proyecto sustitutivo al que hoy tenemos en consideración”. Luego, recordó que en la comisión todas las delegaciones a las que recibieron “manifestaron su opinión contraria al proyecto”.
“Cuando comenzó la sesión de hoy, la miembro informante se refirió al artículo 4° de un proyecto de ley que no es el que tenemos en carpeta”, sobre el que el FA “no fue consultado”, afirmó Hugo. “Nos sentimos avasallados y nos parece que el proyecto tendría que volver a comisión para consultar a las más de 30 delegaciones que recibimos si este nuevo proyecto presentado contempla las sugerencias de todas estas organizaciones sociales, de la sociedad civil y de la academia”, dijo Hugo, y sentenció que “esas no son las formas en las que se debe llevar adelante la discusión de un proyecto, ignorando a la principal fuerza política de este país”.
En tanto, Mariano Tucci (diputado del Frente Amplio) expresó que “la coalición, una vez más, de manera corsaria, en diez minutos, entre cuatro o cinco personas, resuelve modificar la mayoría de los artículos de este proyecto”. “Ya la discusión -y por eso el proyecto tiene que ir a la comisión nuevamente- no se trata de si los niños, niñas y adolescentes son sujetos de derecho o si a través de este proyecto pasan a ser un objeto para resolver los conflictos entre los adultos”, agregó.
A raíz del cuestionamiento y reclamo que realizaron algunos diputados del Frente Amplio, el partido presentó la moción de que el proyecto de ley retornara a la Comisión de Constitución y Códigos de la Cámara Baja, a los efectos de que fuera tratado nuevamente. Pero después de varias argumentaciones, tanto del oficialismo como de la oposición, dicha opción fue rechazada por la mayoría de los legisladores presentes (que contó solo con los votos de la coalición).
Una vez que dicha iniciativa fue rechazada, y tras pasar por otros intervalos de diversa duración (cuartos intermedios), los diputados del Frente Amplio apuntaron a exponer y desmenuzar lo que ellos entendían como falencias que tiene el proyecto presentado por el oficialismo. Además, en reiteradas ocasiones se mencionó que varias organizaciones sociales y civiles estaban y están en contra del texto.
El proyecto tuvo su origen en el 2020, y recién a fines del 2022 tuvo la votación y aprobación en la Cámara de Senadores, para luego pasar a Diputados. Al cierre de esta edición, aún no se había votado el proyecto, y en una lista de 58 oradores, pasadas las 21 horas iban solo seis.