En el impresionante entorno de las pirámides de Guiza, Egipto ha desvelado su nuevo y más esperado tesoro: el Gran Museo Egipcio (GEM). El pasado 1 de noviembre de 2025, el museo celebró su inauguración con un espectáculo vibrante que incluyó luces láser, música de una orquesta sinfónica y bailarines vestidos con trajes que evocaban la grandeza de la antigüedad, marcando el inicio de una nueva era en la presentación del patrimonio egipcio.
Más de 100.000 piezas, que abarcan desde las majestuosas estatuas de Ramsés II hasta los icónicos tesoros de Tutankamón, ocupan este monumental complejo de 500.000 m², el mayor museo en el mundo dedicado a una sola civilización. Durante la ceremonia inaugural, el presidente Abdelfatah al Sisi destacó el GEM como un emblema de “cooperación, paz y estabilidad”, subrayando la capacidad de la historia para unir a las personas a través del tiempo y el espacio. Líderes internacionales, como el rey de España, Felipe VI, y el presidente de Colombia, Gustavo Petro, también fueron parte de este evento significativo, lo que resalta la relevancia global del museo.
La preservación de la historia es más importante que nunca. En el GEM, la famosa estatua de Ramsés II, que ha viajado desde su descubrimiento en 1820, ha encontrado su hogar definitivo. Esta impresionante figura, junto a otros tesoros como el sarcófago dorado de Tutankamón y su famosa máscara funeraria, no solo representan la riqueza cultural del Antiguo Egipto, sino también un fuerte compromiso con la conservación de su legado. Estos objetos, adornados con lapislázuli y oro, capturan la atención de los visitantes, ofreciendo una ventana a la magnificencia de una era pasada.
Uno de los aspectos más destacados del museo es la galería dedicada a los 5.000 artefactos de la colección de Tutankamón, que se exhiben juntos por primera vez desde su descubrimiento en 1922. Esta colección abarca no solo elementos funerarios, sino también objetos de la vida cotidiana del faraón, proporcionando una visión integral de su existencia y del contexto cultural de su tiempo. Los visitantes podrán sumergirse en la historia del faraón más famoso de Egipto, reflexionando sobre la fragilidad de la vida y la durabilidad del legado cultural.
El GEM ha sido diseñado también como un centro de investigación y restauración, incluyendo áreas de almacenamiento accesibles para investigadores y laboratorios dedicados a la conservación. En los próximos años, los visitantes tendrán la oportunidad de observar a expertos trabajando en la restauración de artefactos a través de paneles de vidrio, lo que no solo enriquece la experiencia del visitante, sino que también fomenta un interés mayor en la arqueología y la preservación del patrimonio cultural.
Uno de los tesoros más impresionantes es el barco solar de 4.600 años de antigüedad del faraón Keops, uno de los artefactos de madera más grandes y antiguos de la antigüedad. Este barco, descubierto en 1954 cerca de la Gran Pirámide de Keops, es un testimonio de la ingeniería y la cultura naval del Antiguo Egipto. El museo ha creado un espacio específico para su exhibición, permitiendo a los visitantes apreciar la complejidad de su construcción y su significado en los rituales funerarios de la época.
La trayectoria hacia la inauguración del museo ha sido un proceso de dos décadas, lleno de desafíos políticos y sociales, entre los que se incluyen la agitación tras la revolución de 2011 y el impacto de la pandemia de Covid-19. A pesar de estos obstáculos, el GEM se establece como un símbolo de resiliencia y compromiso con la preservación del patrimonio cultural. La apertura del museo también se presenta como una oportunidad para revitalizar el turismo en Egipto, un sector que ha enfrentado dificultades en los últimos años. El Gran Museo Egipcio no solo es un espacio para exhibir piezas de un pasado glorioso; es un lugar donde la historia cobra vida, invitando a todos a recordar y aprender. Con su apertura al público prevista para el martes 4 de noviembre, el GEM se perfila como un destino turístico vibrante, lleno de energía e historia. Si tienes la oportunidad de visitarlo, no dejes pasar la ocasión de explorar este fascinante lugar que combina cultura y educación en un solo espacio.
Además, el GEM aspira a ser un centro cultural de referencia, no solo atrayendo a turistas de todo el mundo, sino también ofreciendo un espacio para conferencias, talleres y eventos culturales que promuevan el intercambio de ideas y la creatividad. Así, el museo no solo preserva la historia, sino que también fomenta el diálogo e interacción entre diversas culturas, subrayando la importancia de la educación y el entendimiento mutuo en un mundo cada vez más interconectado.









