Informe del CERES: avances con problemas y desigualdades en la educación terciaria

Montevideo continua albergando al 88% de los estudiantes matriculados.

Foto: Udelar

El CERES (Centro de Estudios de la Realidad Económica y Social), ha publicado un reciente estudio titulado  “Situación actual de la educación universitaria en Uruguay” que realiza un análisis del sistema universitario uruguayo, con foco en aspectos como la descentralización de la educación, la competencia entre las universidades, la vinculación con el mercado laboral, y la interacción con el sector productivo en actividades de investigación y desarrollo (I+D), que nos permiten profundizar en algunos aspectos de la problemática de los procesos de dotación de recursos así como visualizar algunas debilidades que restringen el propio desarrollo nacional. El informe plantea que la educación universitaria en Uruguay ha transitado importantes transformaciones en las últimas dos décadas, marcadas por la expansión de la oferta educativa y un aumento significativo de la cantidad de estudiantes y egresados, pero que sin embargo, persisten desafíos clave relacionados con el acceso, el financiamiento y la eficiencia institucional. Incluso este último tema es objeto de un análisis particular, siendo el primer estudio realizado en el cual se focaliza en identificar la problemática de la eficiencia del sistema, a partir de algunos indicadores puntuales sobre los cuales existen datos.

El incremento de la matrícula que actualmente alcanza a un total de estudiantes de educación terciaria de 237.262 estudiantes, de los cuales 79.8% son de universidades, 0,54% de institutos universitarios y los restantes 19,7% están localizados en institutos terciarios no universitarios, más allá de ser una distinción más normativa que educativa. El incremento de la matrícula ha dado lugar a un aumento de los egresados, que el estudio muestra que han pasado de 5000 a 12 mil en el año 2023, con un incremento del 4,4% interanual. Sin embargo constata como finalmente solo el 14% de la población económicamente activa ha completado estudios terciarios, muy por dejado del 41% de los países de la OECD. Las limitaciones en este proceso de aumento de la cobertura y del egreso descansan finalmente en las diferencias sociales de los estudiantes en tanto mientras que el 64% de los jóvenes de 19 a 24 del quintil superior, en el caso del quintil inferior solo asisten a establecimientos el 13%, o sea que tienen una incidencia y representación de cinco veces menor.   Además, el estudio, que como referimos también analiza la eficiencia del sistema, concluye que “al analizar la proporción de graduados respecto a los ingresados 5 años antes, que sugiere la eficiencia en el egreso, se observa un mayor rendimiento de las instituciones privadas (59%), frente a las públicas. El estudio igual relativiza que la duración de las carreras puede influir en esos análisis

En este análisis de debilidades, el estudio se focaliza en la concentración de la oferta en Montevideo, y la exigua o nula oferta en amplias zonas del país. En ese marco, muestra como la capital “continua albergando al 88% de los estudiantes matriculados… concentra el 60% de la oferta de carreras de grado y el 98% de posgrado”. Hay en este sentido, una problemática de concentración en Montevideo más intensa en los posgrados. Visto históricamente se está produciendo un lento avance de ofertas públicas y privadas en el nivel del grado, al tiempo que se conforma una mayor desigualdad en la oferta de niveles de especialización que se mantienen en Montevideo, mostrando una nueva diferenciación en la desigualdad educativa. La concentración en Montevideo, también tiene un correlato de concentración en una parte del interior. En este sentido, no existe oferta de carreras de grado en Canelones, Flores y Florida, y en el caso de los posgrado, solo existe ofertas de este nivel en Maldonado, Rivera y Durazno. Si se analizara el estudio en base a Municipios en los cuales hubiera alguna oferta, la desigualdad sería mucho más intensa. Igualmente, Salto, Paysandú y Maldonado son los departamentos del interior con mayores ofertas de nivel superior. En relación al financiamiento, el estudio muestra que el gasto tal en educación terciaria como porcentaje del PIB se sitúa por debajo del promedio de la OCDE, pero al mismo tiempo devela claramente que la inversión pública es equiparable entre ambas zonas, y que la diferencia se concentra en la baja incidencia del sector privado. Esto nos muestra la baja matrícula terciaria privada en el país, frente a la casi totalidad de países del mundo. La baja canalización de recursos privados a la educación finalmente incide en el gasto total en relación al PIB en el país.

Este estudio reafirma muchas de las debilidades o tragedias en el sistema de educación superior, que finalmente limitan el desarrollo, y que aun son temas pendientes.

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Eco. Claudio Rama

Dr. ED; Dr. DER; Post. Dr

1 Comentario

  1. CONFIRMACION TERRIBLE, PERO NO SORPRESIVA….. DESDE HACE MAS DE 40 AÑOS LA EDUCACION EN ESTE PAIS ESTA EN EL SUBSUERLO… Y CADA VEZ PEOR, SIN PRISA Y SIN PAUSA. SIGUE BAJANDO LOS ESTUDIANTES O QUIENES FIGURAN COMO TALES, DEJAN LA FACULTAD SIN CONOCIMIENTO ALGUNO, SIN ESTAR PREPARADOS PARA ENFRENTAR SU FUTURO, PERO LO PEOR SIGUE SIENDO QUE: CADA ANIMAL QUE SE RECIBE NOS CUESTA MUCHISIMO DINERO, O SEA MAL INVERTIDO…. SOLO GASTOS… Y A ELLO HAY QUE AGREGARLE EL COSTO QUE GENERAN LOS PROFESORES………CERO EXITO, CERO RESULTADO CERO FUTURO, CADA VEZ SON MAS LOS INSERVIBLES. PERO CADAD VEZ MAS ENFRENTAMIENTO CUANDO ALGO SE QUIERE MEJORAR. BIEN DIJO MUJICA «HAY QUE HACERLOS MIERDA»

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