El ataque sucedió el pasado miércoles, cuando la policía acudió al llamado de emergencia tras recibir una denuncia a través del servicio 911. Al llegar a la vivienda, encontraron a la mujer agredida por su expareja, quien ya tenía antecedentes de violencia doméstica. A pesar de la intervención, el agresor volvió al domicilio al día siguiente, mientras la mujer cenaba junto a sus hijas, una amiga y su hijo. En ese momento, la roció con alcohol e intentó prenderla fuego.
La situación fue rápidamente controlada, pero la Justicia decidió otorgar custodia a la mujer. Sin embargo, el pasado viernes, el agresor violó la medida y nuevamente se acercó a la vivienda, donde fue detenido. En sus pertenencias llevaba dos litros de nafta, un cuchillo y un encendedor, lo que daba cuenta de sus intenciones de repetir el ataque.
La pareja convivió por más de 20 años y tienen dos hijas en común. El hombre, quien enfrenta cargos por un delito de homicidio especialmente agravado en grado de tentativa y un delito de intento agravado en régimen de reiteración real, deberá cumplir prisión preventiva por 90 días mientras se avanza en la investigación del caso.