La Junta Departamental recibió la solicitud de la comuna de Montevideo de aprobar un impuesto que estará sustituyendo la Tasa de Inflamables, la cual fue declarada inconstitucional por al Suprema Corte de Justicia. Esta Tasa se cobra a empresas que transportan líquidos y gas licuado para su venta. Quién interpuso el recurso fue Ancap, empresa que no deberá pagar más la tasa que significaba un gasto de u$S 15 millones por año. Uno de los argumentos que se esgrimía era que no se trataba de una tasa sino de un impuesto. Tras la resolución de la Justicia, la comuna capitalina decidió eliminar dicha tasa y mandó un mensaje a la Junta Departamental para la aprobación de un impuesto del 0,5% del valor de la carga transportada, a los vehículos «carguen o descarguen a granel, dentro de los límites del departamento, líquidos inflamables y gas licuado de petróleo para su comercialización». No se aplica para que queroseno y el alcohol azul.
El presidente de Ancap, Alejandro Stipanicic, dijo que “si hay alguna intención de restituir esa tasa bajo la forma de un impuesto, quienes lo propongan, tendrán que utilizar los mecanismos legales pertinentes». Agregó que asimismos «se tendrán que hacer cargo» de poner un nuevom impuesto a los combustibles «que ya están suficientemente caros y que tienen una carga de impuestos bastante importante”. También sostuvo que si tal impuesto es legal «Ancap lo va a tener que aplicar y la población lo tendrá que pagar. Espero que no prospere, porque no se trata de costos que sean realmente retributivos de algún servicio para la población”. Sobre al legalidad de la creación del impuesto existe controversia, ya que para algunos juristas la Junta Departamental no lo puede hacer.
Hay que invertir, poner una cañería que permita conectar la planta de ANCAP con un despacho de combustibles en San José.