El presidente venezolano, Nicolás Maduro, informó que su gobierno ha acordado trabajar, junto a la Casa Blanca, en una agenda de conversaciones y coordinaciones basadas en el respeto y la diplomacia.
Maduro confirmó que el pasado sábado recibió a delegados del Gobierno estadounidense en el Palacio de Miraflores, sede del Gobierno central, e informó que «tuvimos una reunión que podría calificarla de respetuosa, cordial, muy diplomática».
Detalló que su país tiene toda la voluntad de «avanzar en una agenda que permita el bienestar y la paz de los pueblos de nuestro hemisferio, de nuestra región, de América Latina y el Caribe».
Calificó como muy importante «poder conversar cara a cara temas de máximo interés de Venezuela y del mundo».
Juan Guaidó, al que reconoce EEUU como presidentede Venezuela, no fue avisado del viaje, según informó el diario New York Times. Eso significa que, en la práctica, Washington reconoce al régimen de Maduro como el gobierno de Venezuela, rompiendo así con tres años en los que EEUU, la UE, y otros 60 países han considerado a Guaidó presidente legítimo del país. La reunión entre los gobiernos de EEUU y Venezuela se realizó horas antes de que Biden anunciara que prohibiría las importaciones de petróleo ruso.
El crudo de Venezuela es pesado, como el ruso. Eso simplifica, en principio, reemplazar uno con otro. El 3% del petróleo crudo que Estados Unidos importa procede de Rusia, aunque, cuando se consideran los productos derivados, la proporción alcanza el 8%.
EEUU y Venezuela han reconocido que han hablado de energía, un tema en el que Maduro se declara «activado». «Venezuela estará al frente en las iniciativas para estabilizar el mercado petrolero», ha afirmado el mandatario venezolano. En este sentido, ha ratificado desde el Palacio de Miraflores la capacidad que tiene Venezuela para elevar su producción de crudo a más de 3 millones de barriles diarios «si hicieran falta para la estabilidad del mundo». Sin embargo, las sanciones que Estad …
Maduro se abre a una «agenda» con Estados Unidos tras un primer encuentro sobre energía
Sin embargo, las sanciones que Estados Unidos aplica desde 2019 han reducido dicha producción a unos 800.000 barriles. Por su parte, la portavoz de la Casa Blanca, Jen Psaki, ha confirmado en rueda de prensa el encuentro de la delegación con Maduro, pero tampoco ha entrado en detalles, más allá de decir que se trataron varios asuntos y que, entre ellos, «sin duda», estuvo la seguridad energética.Agregó que la delegación también planteó la situación de ciudadanos y residentes estadounidenses detenidos por el gobierno de Maduro, incluidos seis ejecutivos de Citgo -filial en Estados Unidos de la petrolera venezolana PDVSA- arrestados en 2017. Pero enfatizó que el diálogo sobre energía y el destino de los detenidos son «conversaciones separadas».
Estados Unidos y Venezuela rompieron relaciones a principios de 2019, luego de que Maduro asumió un segundo mandato en elecciones consideradas fraudulentas por la oposición y medio centenar de países.Las medidas incluyen un embargo vigente desde abril de 2019 que impide a Venezuela negociar su crudo -que representaba 96% de los ingresos del país- en el mercado estadounidense.
Diálogo con la oposición
En este marco de distención con EEUU, Maduro dejó asentada su decisión de avanzar hacia una nueva etapa de diálogo, con miras al «reformateo inmediato» y la «dinamización» de las conversaciones entre los distintos actores políticos.
El mandatario venezolano trazó al menos cinco líneas que cimentarán los próximos encuentros —aún sin fecha— y que tendrían como prioridad abordar los «procesos venideros» de interés nacional.Entre las líneas que dictó el presidente venezolano para iniciar la nueva etapa del diálogo en su país están las siguientes: reactivación y «reformateo inmediato» del proceso de conversaciones, participación de todos los factores políticos, sociales, económicos, religiosos y culturales y dinamización del mecanismo de diálogo para hacerlo «más inclusivo, amplio y abarcador». A esto se agrega el otorgamiento de «todas» las garantías políticas para los procesos venideros y la recuperación efectiva del país.
«Vamos hacia un proceso de diálogo más inclusivo, abarcador, amplio, que le tienda la mano a todos los venezolanos y venezolanas que quieren echar adelante nuestro país, recuperar efectivamente nuestro país», resaltó Maduro.
