Pakistán: Comisión Electoral inhabilita al ex primer ministro Imran Jan tras su condena

La Justicia también impuso al exmandatario una multa de 100.000 rupias --algo menos de 1.100 euros-- por ocultar detalles sobre los mencionados obsequios, según informaciones recogidas por el diario local 'Dawn'.

Pakistán

La Comisión Electoral de Pakistán ha formalizado la inhabilitación durante un periodo de cinco años del ex primer ministro Imran Jan, que ha presentado precisamente este martes un recurso ante el Tribunal Superior de Islamabad contra la condena a tres años de prisión por corrupción impuesta la semana pasada.

Su abogado, Naeem Panjutha, ha confirmado que ha presentado la apelación en relación con un caso que se remonta a su etapa al frente del Gobierno, cuando vendió ilegalmente una serie de regalos estatales recibidos en condición de primer ministro.

La Justicia también impuso al exmandatario una multa de 100.000 rupias –algo menos de 1.100 euros– por ocultar detalles sobre los mencionados obsequios, según informaciones recogidas por el diario local ‘Dawn’.

La sentencia indica que Jan habría presentado «detalles falsos a la Comisión Electoral de Pakistán» y que, por ende, «es culpable de prácticas corruptas», tal y como manifestó el viernes el juez de distrito de Islamabad encargado del caso, Humayun Dilawar.

Bajo custodia

Jan se encuentra ahora mismo técnicamente inhabilitado para ocupar cualquier cargo público durante un periodo de cinco años, tal y como establece la Constitución paquistaní, y permanece bajo custodia.

La Justicia paquistaní busca poner fin a un caso que se remonta a meses atrás, cuando Jan fue acusado del robo de costosos regalos concedidos al Estado por parte de mandatarios internacionales. Entre los obsequios que Jan recibió mientras ocupaba la Jefatura de Gobierno se encontraba un rifle AK-47 bañado en oro, joyas, diamantes y relojes, así como gemelos de lujo entregados por gobernantes de lo países más ricos del golfo Pérsico.

Según la legislación paquistaní, Jan estaba obligado a entregar estos obsequios al Estado. Sin embargo, el ex primer ministro los vendió en la ciudad emiratí de Dubai y nunca llegó a declarar los beneficios en su patrimonio.

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