El prosecretario de Presidencia de la República y presidente de la Junta Nacional de Drogas (JND), Rodrigo Ferrés, expuso en el 65° período de sesiones de la Comisión de Estupefacientes de las Naciones Unidas (ONU), y explicó los alcances de la Estrategia Nacional de Drogas 2021-2025.
Ferrés explicó que, con la crisis sanitaria de los últimos dos años como marco y en el camino de generar y gestionar políticas públicas que lleven soluciones a las personas, los diferentes estados han continuado la lucha contra los mercados ilícitos de drogas que no han detenido su accionar.
Durante su intervención expresó que en el ámbito de la salud, en atención a la crisis sanitaria y humanitaria, se debió fortalecer la cobertura y calidad de los servicios de prevención, atención, tratamiento y rehabilitación en materia de consumos problemáticos. El jerarca señaló además que la política pública en el área se enfocará en “no dejar a nadie detrás” y priorizará a las personas más vulnerables de la sociedad.
El presidente de la JND explicó que Uruguay cuenta con la Estrategia Nacional de Drogas (END) 2021-2025, que resulta de un proceso de trabajo y consulta interinstitucional con actores nacionales con vinculación directa a la temática.
El funcionario aseguró que “se trata de una política de drogas con visión integral, con perspectiva de derechos humanos y con las personas en el centro, esto es apelar a su salud, bienestar y libertad, sobre la base de un modelo de regulación y control de los mercados cuyo objetivo sea la gestión de los riesgos y la reducción de los daños, con apoyo de la evidencia científica.
Ferrés fue enfático al señalar que se asumió “una lucha frontal contra el narcotráfico y el lavado de activos”, y añadió que se trata de una problemática mundial “que requiere cooperación, intercambio regional e internacional”.
Sobre la base de la END 2021-2025, Uruguay se compromete a avanzar hacia la consecución del logro de los Objetivos de Desarrollo Sostenible a partir de la educación con la promoción de trayectorias de vida resilientes, y en la prevención de usos problemáticos de drogas.
También se apuesta al apoyo a los miembros más vulnerables de la sociedad, con foco en personas privadas de libertad, personas en situación de calle, víctimas de violencia doméstica y de género, entre otras, bajo el lema de “no dejar a nadie detrás”.
Ferrés dedicó un capítulo especial a la importancia que otorga Uruguay al multilateralismo y a la igualdad jurídica entre Estados como base del principio de responsabilidad compartida en el tema drogas.
