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Reforma de la seguridad social: otra forma de desigualdad

“Las mujeres ocupamos dos tercios de nuestro tiempo "libre" en las tareas de cuidados de otros, trabajo que no es remunerado y esto no se tiene en cuenta para nada en la ley”.

La reforma de la seguridad social impulsada por el gobierno de Luis Lacalle Pou y aprobada con los votos de los legisladores que integran la coalición de derecha, es para expertos, organizaciones sociales y el PIT-CNT injusta con los más débiles y además que claramente incumple con una promesa de campaña del actual presidente.

Decía Luis Lacalle Pou en el compromiso por el país, rumbo a las elecciones 2019: “Hay que respetar los derechos adquiridos de las personas» y no se puede romper el «contrato» que se hace con el trabajador una vez que comienza a trabajar”.

El mecanismo de democracia directa se hizo imprescindible y la recolección de firmas para impulsar el plebiscito sobre la  reforma de la seguridad social se puso en marcha.

Los tres pilares básicos de la reforma que se impulsa, son: Eliminar las AFAP (el sistema de ahorro individual previsional) y el actual régimen mixto previsional; establecer límites precisos para la causal jubilatoria en 60 años de edad y 30 años de trabajo; estipular montos mínimos para los haberes jubilatorios que se basarán en el Salario Mínimo Nacional.

El plazo límite para entregar las firmas ante la Corte Electoral es el 26 de abril, y si bien se requieren 270.000 rúbricas válidas para habilitar el plebiscito (equivalentes al 10% del padrón electoral), la Comisión espera recolectar unas 500.000 adhesiones.

Un aspecto no menor de esta reforma es que impacta de forma más contundente en las poblaciones más vulnerables con énfasis en las mujeres.

Dialogamos con Paola Castro, docente de historia, e integrante del Plenario Intersindical de Sauce, Canelones que lo componen Fenapes, Sintep, Ademu, APU, Umntra, Unott, Ascot.  Y así tener la visión de la mujer trabajadora, organizada, de cómo impacta la reforma de la seguridad social en la sociedad toda pero con énfasis en las mujeres.

“En el marco del Día de la Mujer Trabajadora, queremos poner en diálogo la reforma de la seguridad social aprobada el año pasado en nuestro país.

Para Castro, otro punto negativo es que hay mayor apertura para el lucro por parte de las AFAPS, priorizando el ahorro individual y atacando el sistema solidario uruguayo.

“Nosotras entendemos que la reforma es mala para la clase obrera, pero el golpe es más duro aún para las mujeres porque aumenta la inequidad de género.

Al dar prioridad a las AFAPS (haciéndolas obligatorias), muchas prestaciones se van a ver recortadas, en múltiples casos, prestaciones vinculadas a la maternidad y los cuidados son los únicos ingresos que recibe una familia”.

Por otro lado, respecto al aumento de la edad jubilatoria señala: “en nosotras recaen en su mayoría los trabajos vinculados a las tareas domésticas y de cuidados, eso hace que las condiciones físicas con las que llegamos para subir escaleras, higienizar a personas adultas, etc., sean de una exigencia física tal que implica un esfuerzo desmedido. Extender 5 años más la posibilidad de jubilarse va a provocar que a muchas mujeres les sea muy difícil poder jubilarse”.

“Las mujeres ocupamos dos tercios de nuestro tiempo «libre» en las tareas de cuidados de otros, trabajo que no es remunerado y esto no se tiene en cuenta para nada en la ley”, enfatiza.

También indica que “otro punto relevante es los nuevos cálculos para concretar el monto de las jubilaciones. Hasta el 2023, se toman los últimos 20 años de trabajo o los 10 mejores; la reforma toma los 25 años, nuevamente estamos en desventaja. Y, por supuesto, no hay ninguna referencia a la brecha salarial. Las mujeres cobramos salarios más bajos que los varones a lo largo de toda la vida laboral”.

Para finalizar destaca: “Entendemos que la seguridad social es un derecho humano fundamental y como tal, el Estado debe garantizar para todos y todas, lejos de ello está el espíritu de esta reforma. Por eso convocamos a todas las mujeres a firmar por nuestros derechos y habilitar la posibilidad de un plebiscito.

 8M: NI UN DERECHO MENOS.

4 Comentarios

  1. A cuántas mujeres que cocinan, lavan la ropa, planchan, friegan pisos y vajilla, llevan los niños a la escuela, cuidan a los enfermos de la familia, y atienden al espso y 4 o 5 hijos, les he escuchado decir, yo no trabajo. Entre tantas cosas malas, la reforma jubilatoria (no fue de la seguridad social, como dicen, sólo de las jubilaciones) perjudica a las mujeres especialmente. Bueno, qué podía esperarse…

    • Estaria buenismo que pagaran por labores domesticos, vacaciones y jubilacion. El tema de siempre es quien paga?, el estado se tendria que meterven las familias y obligarca los padres de familia, abuelos e jijosca pagarle acsus madres, ponerlacen caja y darke licencia. La madre solo trabajaria 8 horas porcduas asi que despurs de las 3 no de le puede pedir nada. Nada mejorvquecel estado regulando nuestra vida y as egurandose la justicia social yvel derecho de tantas mujeres.

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