A los 48 años falleció Samuel Robert Rivers, pilar fundamental en la escena del nu metal como bajista, vocalista de fondo y cofundador de Limp Bizkit. Nacido en Jacksonville, Florida, Rivers dejó un legado imborrable en la música con su estilo distintivo y carisma, contribuyendo al éxito de una de las bandas más influyentes de finales de los 90 y principios de los 2000.
Como bajista, Rivers fue el «pulso» de Limp Bizkit, aportando líneas de bajo groovy que sustentaban himnos como Break Stuff, Rollin’ y Nookie. La banda alcanzó ventas de más de 40 millones de discos, con álbumes icónicos como Three Dollar Bill, Y’all (1997), Significant Other (1999) y Chocolate Starfish and the Hot Dog Flavored Water (2000). En Results May Vary (2003), Rivers demostró su versatilidad tocando guitarra en temas como Creamer y Lonely World tras la salida temporal de Borland. Su estilo, caracterizado por el uso de bajos Fender Jazz de 5 cuerdas en vivo y Wal en estudio, junto a amplificadores Ampeg y Warwick, destacaba por un enfoque orgánico, tocando con los dedos para un sonido cálido y dinámico.
En 2015, Rivers enfrentó un grave problema de salud: una enfermedad hepática causada por el consumo excesivo de alcohol, que lo llevó a someterse a un trasplante de hígado. Esto lo obligó a alejarse temporalmente de la banda. Sin embargo, su resiliencia lo trajo de vuelta en 2018, retomando su lugar en el escenario con la misma energía que lo caracterizaba.

