El Real Madrid y el FC Barcelona abrirán este jueves en el Estadio Santiago Bernabéu (21.00 horas/La1) su semifinal de la Copa del Rey 2022-2023, un tercer Clásico de esta temporada en el que los madridistas buscan revancha tras lo sucedido en la Supercopa de España y los azulgranas volver a sonreír tras dos decepciones y pese a bajas importantes.
Este primer capítulo para sacar billete a la final de La Cartuja del próximo 6 de mayo inicia el pequeño carrusel de enfrentamientos en algo más de un mes entre los dos equipos, que se verán las caras dos veces más, todas ellas con mucho en juego ya que el 19 de marzo tendrán un choque con aroma a decisivo en LaLiga Santander en el Spotify Camp Nou, mismo escenario para la vuelta copera de principios de abril.
Pero antes medirán fuerzas en el Bernabéu donde buscarán coger ventaja en un torneo del KO que se ha convertido en una prioridad para ambos en este momento de temporada. Las semifinales de Copa no dan un título, pero sí descartan a uno en la carrera por conseguir un trofeo, algo muy necesario para merengues y culés por diferentes motivos.
Los de Carlo Ancelotti ya cedieron el de la Supercopa de España ante su máximo rival, con el que todavía tiene una desventaja amplia en la Liga (7 puntos), y por ello conquistar una competición algo ‘maldita’ desde hace mucho tiempo podría servir de bálsamo y no lo dejaría todo en manos de la Champions. Los de Xavi Hernández, por su parte, saben que para consolidar su proyecto no pueden dejar pasar ninguna oportunidad, más cuando ya han perdido su segunda ‘bala’ europea y por el rival que tiene.
El 14 veces campeón de Europa no alcanza la final copera desde 2014, con su actual técnico en el banquillo, y después de superar rondas con mucho trabajo ante el Cacereño, el Villarreal y el Atlético, ahora tiene que tumbar a un Barça que fue muy superior en enero en la final de la Supercopa de España.
El conjunto catalán se impuso con autoridad por 3-1 y cogió fuerzas en un inicio de 2023 en el que arrancó mejor que el madridista, al que logró descolgar en la carrera liguera, pero al que perdonó el pasado fin de semana con su segunda derrota en el torneo doméstico ante el Almería, desperdiciando la oportunidad de ponerse diez puntos por delante.
Ese revés se unió al sufrido días antes en Old Trafford donde el Manchester United le remontó para eliminarle también de la Liga Europa y arrojar algunas dudas sobre un equipo que no parece estar atravesando un momento excesivamente brillante en su juego. El Real Madrid, en cambio, alterna luces, como en Anfield, con sombras como en el derbi de pasado sábado ante el Atlético de Madrid.
Xavi no ha dudado en otorgar el favoritismo a su rival, que parece más ‘obligado’ de inicio por su derrota y sometimiento en Arabia Saudí y por jugar en su estadio, donde sí se llevó el Clásico liguero con solvencia (3-1), una actuación que tratará de repetir para afrontar la vuelta con más comodidad.
