El ministro de Relaciones Exteriores de Uruguay, Mario Lubetkin, participa esta semana en el IV Foro de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac) con China, en un contexto en el que Montevideo busca afianzar lazos con Asia, pero ya no persigue un Tratado de Libre Comercio bilateral con el país asiático, como intentó durante la administración de Luis Lacalle Pou.
“Uruguay debe mirar hacia Asia, pero con una lógica regional”, expresó Lubetkin, quien también adelantó que su país asumirá la presidencia pro tempore del mecanismo Celac-China en 2026. Durante su estadía, además, encabezó la inauguración del Consulado General de Uruguay en la región de Hong Kong-Macao.
La posición actual del gobierno, encabezado por el presidente Yamandú Orsi, apunta a fortalecer la relación bilateral con China, sin avanzar en acuerdos comerciales de forma aislada. En declaraciones previas, Orsi señaló que «los avances similares a un TLC deben involucrar a la región», desmarcándose así del enfoque unilateral de su antecesor.
Durante su visita a China en marzo, Orsi también se reunió con el ministro de Agricultura y Asuntos Rurales de ese país, Han Jun, con quien discutió la agenda bilateral y temas de interés común para América Latina y el Caribe.
La experiencia del gobierno anterior dejó enseñanzas. En julio de 2022, el expresidente Lacalle Pou había anunciado que el estudio de factibilidad para un TLC con China había concluido de forma positiva, pero los esfuerzos por concretarlo sin el aval del Mercosur generaron tensiones dentro del bloque.
Con un cambio de enfoque, Uruguay parece ahora apostar por una inserción internacional coordinada desde el Mercosur, priorizando alianzas estratégicas como la que propone la Celac con China.