Este fin de semana, asociaciones civiles y defensores de derechos humanos han brindado asistencia a la caravana de migrantes que avanza en condiciones precarias por la frontera sur de México. La caravana, compuesta por al menos 3,000 personas, se encuentra a unos 80 kilómetros de Tapachula.
Las organizaciones informan que entre los migrantes se encuentran cerca de 400 niños, quienes requieren con urgencia ayuda humanitaria, incluyendo agua y alimentos. La situación de estos menores es especialmente crítica, y las asociaciones han destacado la necesidad urgente de apoyo para garantizar su bienestar y supervivencia durante el trayecto.
La entrega de alimentos y suministros esenciales busca aliviar las difíciles condiciones que enfrenta la caravana, a medida que los migrantes continúan su travesía en busca de mejores oportunidades y seguridad.
