El presidente brasileño, Jair Bolsonaro, ha calificado este viernes como «simbólico» el indulto que ha concedido horas antes al diputado Daniel Silveira, condenado a ocho años y nueve meses de cárcel por amenazas de muerte e incitación a la violencia contra los jueces del Tribunal Supremo. «Ayer fue un día importante para nuestro país.
No por la persona que estuvo en juego (Silveira) ni por quien fue protagonista de este episodio, sino por el simbolismo». Bolsonaro el jueves emitió un indulto para su aliado recientemente condenado, lo que provocó una reacción violenta de los adversarios que afirman que el presidente se está excediendo en sus límites constitucionales y una vez más socava la Corte Suprema. Bolsonaro califica como «simbólico» el indulto a uno de sus aliados condenado a prisión por amenazas al Supremo
El indulto otorgado por Bolsonaro libera a Silveira de recalar en prisión, no sí de la pena de inhabilitación para presentarse a un cargo público durante el tiempo que dure la sentencia. A su vez, deberá también hacer frente a la multa económica de cerca de 192.000 reales (37.800 euros), según detalla ‘O Globo’.
La Corte Suprema de Brasil condenó el miércoles al legislador Daniel Silveira por 10 votos contra 1 por incitar ataques físicos contra los jueces de la corte y otras autoridades.
También fue despojado de su escaño en el Congreso y se le prohibió postularse para cualquier cargo en las elecciones de octubre. Bolsonaro dijo durante una transmisión en vivo que su decisión “es necesaria para que la nación camine por los caminos determinados por la constitución”. “La libertad de expresión es un fundamento esencial de nuestra sociedad”, dijo el presidente brasileño. Más tarde, su decreto insistió en que Silveira fue condenada indebidamente.
Los partidarios del presidente le han pedido repetidamente que defienda a Silveira de lo que ven como una persecución política.
El presidente ha tenido una relación conflictiva con los magistrados del máximo tribunal desde que asumió el cargo en enero de 2019. Más recientemente, se ha centrado en quienes también encabezan la máxima autoridad electoral del país, afirmando sin pruebas que el sistema brasileño de votación electrónica podría estar manipulado.
Bolsonaro va detrás del expresidente Luiz Inácio Lula da Silva en las primeras encuestas, y muchos políticos y analistas ven sus enfrentamientos con la corte y las autoridades electorales como un indicio de que no concederá la elección si pierde.
“Bolsonaro acaba de transformar la institución de los indultos en una vergüenza institucional”, dijo en Twitter Ciro Gomes, tercero por debajo del 10% de las encuestas. “Está tratando de acelerar su marcha hacia un golpe de Estado. Pero no tendrá éxito”.
