1972 es considerado el año de mayor violencia política y represión estatal, pudiéndose constatar, según datos oficiales, la detención -por parte de las Fuerzas Conjuntas- de un total de 2146 ciudadanos así como la muerte de 55 ciudadanos por responsabilidad del Estado (más de la mitad de los muertos y asesinados en el período 1968-1973).
El 24 de febrero de 1972 el Movimiento de Liberación Nacional- Tupamaros (MLN-T) secuestra a Nelson Bardesio, fotógrafo policial, quien brinda a sus captores un largo testimonio acerca de las actividades de los grupos parapoliciales y paramilitares conocidos como el “Escuadrón de la Muerte” o el “Comando Caza Tupamaros”. Los datos obtenidos permitieron individualizar a varios de sus integrantes. Entre los miembros identificados se encontraban: el inspector Víctor Castiglioni, el comisario Hugo Campos Hermida, el ex subsecretario del Ministerio de Educación y Cultura Armando Acosta y Lara, el subcomisario Óscar Delega, entre otros.
Así,el MLN-T confeccionó un plan de acción denominado “Plan contraofensivo 1972”, que consistía en la ejecución de miembros de dicho Escuadrón. El 14 de abril de 1972, cuatro integrantes del Escuadrón fueron muertos por los Tupamaros, en tanto que las Fuerzas Conjuntas dieron muerte a ocho militantes de la organización en diversos procedimientos represivos desplegados en Montevideo.
Al día siguiente, el 15 de abril de 1972, la Asamblea General votó el “Estado de Guerra Interno”, una original figura jurídica que posibilitó, entre otras cosas, la suspensión de las garantías individuales y el juzgamiento de civiles por la justicia militar, aplicándoles el Código Penal Militar con el consiguiente incremento de las penas de prisión.
Un mes más tarde, el 15 de mayo de 1972, la Asamblea General aprobó una prórroga por 45 días, hasta tanto se votara la “Ley de Seguridad del Estado y del Orden Interno” (Ley 14.068), lo que ocurrió el 6 de julio de 1972. La misma entró en vigencia el día 12 del mismo mes y año, sustituyendo al “Estado de Guerra Interno”. Esta ley declaraba a los delitos contra la patria como delitos militares, a la vez que creaba otras nuevas figuras delictivas que incorporaba al Código Penal Militar para aplicar a ciudadanos civiles.
Entre tanto, en el Parlamento y en la Asamblea General, se sucedían las intervenciones denunciando distintos casos en donde quedaba manifiesto el accionar represivo de las Fuerzas Conjuntas. Estas denuncias se realizaban ante las reiteradas solicitudes del Poder Ejecutivo de continuar prorrogando la suspensión de las garantías individuales y ante la muerte en los cuarteles de numerosos detenidos.
Casos conexos: Como respuesta al plan de acciones desplegado por el MLN-T el 14 de abril, las Fuerza Conjuntas dieron inicio a una serie de procedimientos que culminarán con la muerte de 8 integrantes de dicha organización.
Cercano al mediodía del 14 de abril, en el Cerrito de la Victoria, en la intersección de Francisco Plá y Nicolás Herrera, mueren Jorge Nicolás Gropp Carbajal y Norma Carmen Pagglianno Varot, y resultó herido el Sub Comisario Reyes.
Uno de los otros dos procedimientos desarrollados cercano a las 14hs., sucedió en la calle Amazonas N° 440, en la que intervinieron funcionarios del Departamento No 5 y efectivos del Batallón de Infantería No 1 “Florida”, soldados al mando del capitán Carlos Calcagno y policías liderados por el Comisario Hugo Campos Hermida. Murieron Ivette Rina Giménez Morales y su esposo Luis Martirena Fabregat y fueron apresados David Cámpora y Eleuterio Fernández Huidobro.
El otro procedimiento se produjo en la calle Pérez Gomar N° 4392, dirigido por Inspector Víctor Castiglioni, en el que murieron Jorge Alberto Candan Grajales, Armando Hugo Blanco Katras, Gabriel María Schroeder Orozco y Horacio Carlos Rovira Grieco. Fueron detenidos Carlos Rovira Placeres, Filomena Grieco de Rovira, Susana Mabel Loreley Augerot Macchi y José Mario Grieco Mellagrana.
El asalto a la casa de la calle Amazonas
Hacia las 14 horas se inició un procedimiento de las Fuerzas Conjuntas en la zona de Malvín, donde se había ubicado una residencia que era ocupada por integrantes del MLN. En la casa residía el matrimonio constituido por Ivette Rina Gimenez Morales y Luis Martirena Fabregat junto con sus dos hijas, que en ese momento se encontraban en la escuela.
En la misma casa se encontraban escondidos Eleuterio Fernández Huidobro y David Cámpora, en un berretín1 ubicado en una especie de doble techo.
Las versiones oficiales, brindadas y difundidas por las FFCC se contradicen con los testimonios de los testigos. Las primeras señalan que se trató de un intenso tiroteo, mientras que los testigos afirman que cerca de la hora señalada, los disparos comenzaron desde fuera de la finca. En el exterior de la misma se encontraban funcionarios del Departamento No 5 de la DNII a mando del Comisario Hugo Campos Hermida y un contingente de 40 soldados del Batallón de Infantería Nro. 1 bajo las órdenes del Capitán Carlos Calcagno y con apoyo de un helicóptero.
El matrimonio Martirena, expresa Cámpora, intenta detener el tiroteo gritando que estaban desarmados, pero son abatidos por las FFCC. Las balas atravesaron paredes y penetraron en un berretín en el que se encontraban David Cámpora y Eleuterio Fernández Huidobro, quienes sobrevivieron porque el Juez Daniel Echevarría y un actuario habían llegado al lugar. Fernández Huidobro fue trasladado al Hospital Central de las Fuerzas Armadas por tener una herida de bala en el cuello.
En el libro Alto el fuego (Montevideo, 2009), Nelson Caula y Alberto Silva relatan, sobre el 14 de abril de 1972: (…) a primeras horas de la tarde las Fuerzas Conjuntas rodean la manzana que circunda una casa ubicada en la calle Amazonas. Allí mueren alcanzados por gran cantidad de disparos, fundamentalmente ametralladoras, el escribano Luis Martirena Fabregat y su esposa Ivette Giménez. Horas después de permanecer en la finca, las Fuerzas Conjuntas se encuentra con la sorpresa de que, en un berretín que no habían encontrado, estaban Eleuterio Fernandez Huidobro, herido de bala y David Cámpora.”
En el mismo libro, los autores citan al Senador Erro: “cuando tocaron la puerta del escribano Martirena, éste fue asesinado. Cuando su mujer salió, manos en alto, le dijeron que con ella no tenían problemas, la dejaron caminar dos pasos y la acribillaron por la espalda”. El testimonio de David Cámpora: “A la hora 14 y 30 finaliza la reunión de los Ministros, iniciada a las 11 y 30. Se anuncian mensajes a la Asamblea y que los detenidos por subversión quedarán a disposición de las Fuerzas Conjuntas.
Las Fuerzas Conjuntas rodean la manzana comprendida entre las calles Amazonas, Orinoco, Pilcomayo y Míchigan. Se oyen numerosos disparos en la finca de Amazonas 1440. Mueren alcanzados por nutrido fuego de ametralladoras el escribano Luis Martirena y su esposa Ivette Giménez de Martirena. Los hijos menores del matrimonio se encontraban en la escuela. Horas después, estando en el lugar el Juez, Dr. Echeverría, se oye del interior de un placard secreto un aviso de que allí hay un herido. Localizando el lugar es detenido David Alberto Cámpora, contador integrante del MLN, fugado del penal de Punta Carretas. El herido, Eleuterio Fernández Huidobro es conducido por policías al Hospital Militar”.
El ex agente de inteligencia policial Winston Silva Cordero, relató al diario “La República” el 14 de abril de 1993: “Cuando tomamos la casa por asalto encontramos a la señora de Martirena que corría histérica de un lado para otro, con las manos en alto (…) el inspector Castiglioni metió el caño de su arma en su boca y la ejecutó (…) en la casa no había ningún tipo de arma, pero nosotros efectuamos cientos de disparos”.
Eleuterio Fernández Huidobro en su libro de mayo de 2001, relata: “(…) En medio de esa tormentosa realidad, nos encontrábamos, además, con dos grandes operaciones, a realizarse en Montevideo, en plena marcha: la fuga de Punta Carretas (que finalmente se produciría el 12 de abril y en la que, entre otros, se fugaría Amodio y el Plan Hipólito, de ataque frontal al Escuadrón de la Muerte, que se llevaría a cabo, finalmente el 14 de abril.
Nos cae la gruesa responsabilidad de no haber frenado, tajantemente, esta última. Caímos en un grueso error de “demagogia interna”
(…) el mal vaticinio que dichos compañeros hicieran en marzo de 1972 se cumpliy puntualmente: dejamos la seguridad de aquel grupo de fierro para hundirnos en los locales supuestamente más seguros del MLN: los de su Dirección máxima. Todos ellos, como después supimos, habían sido entregados ya en febrero por Amodio quien llevaba sus teléfonos en la agenda. Y no nos avisó.
Entre ellos el da la calle Pérez Gomar, el de Brito del Pino, el de Amazonas….los del 14 de abril.
Cuando tomamos el ómnibus para Montevideo íbamos, sin saberlo, con todo el MLN, a una trampa mortal”.
Testimonios tomados por Alejandro Pérez del 15 de abril de 2006 :
“(…) Desde febrero, David Cámpora y Eleuterio Fernández Huidobro vivían en un escondite (berretín, en la jerga tupamara) armado en el hogar del matrimonio Martirena- Giménez en Amazonas 1440. (…) lloviy fuego de artillería durante varios minutos (…) Las Fuerzas Conjuntas entraron a la casa y la vaciaron como si fuera una mudanza. Un rato después, llegó el juez en lo criminal Daniel Echeverría. Pidió para hacer una inspección ocular.
Por pura casualidad, el comisario Bergeret encontró en el placar del baño la entrada al berretín. Tanteando el techo pudo levantar con facilidad una tapa de 70 kilos que Cámpora olvidó trancar por socorrer a Fernández Huidobro.
(…) La Policía no sabía aún el tesoro que había encontrado. Fernández Huidobro sí se dio cuenta del peligro que estaba corriendo. Dio la orden a Cámpora de entregarse. Herido y con un hilo de voz, le dijo a su compañero: «grita que somos dos y que estamos desarmados». (…) Campos Hermida se vanagloriaba de ser uno de los integrantes de las Fuerzas Conjuntas que no practicaba apremios físicos. Ese día dio garantías y cumplió el deseo de alto al fuego pedido por «El Ñato», a quien conocía de otra tragedia: el asalto de Pando. En 2004, el policía confirmó la historia al semanario Brecha.
(…) «El fato» y Cámpora zafaron. Los Martirena no pudieron. (…)”
La versión de las FFAA
La reseña oficial sobre los hechos del 14 de abril de 1972 aparecen descritos en el Tomo I (Segunda Parte) del libro «Subversión» (Las Fuerzas Armadas al Pueblo Oriental), donde aparece una descripción pormenorizada de la estructura y organización del MLN-T y una cronología de hechos entre junio de 1960 y diciembre de 1973. Sobre el 14 de abril de aquel año, se reporta sobre las 8 de la mañana «y desde dos automóviles, integrantes del MLN-T acribillan con fuego de ametralladoras, en las calle Rivera y Soca, a un patrullero policial, muriendo el subcomisario Oscar Delega Luzardo y el agente Carlos A. Leites y quedando gravemente herido otro agente policial». Una hora más tarde, en la localidad de Las Piedras, «es ametrallado, donde vive, desde un automóvil que estuvo aguardando en la zona, el capitán de corbeta Ernesto Motto, quien muere en el acto». Dos horas más tarde, «y desde una ventana del segundo piso de la iglesa Protestante, sita en las calle Constituyente y Barrios Amorín, dos francos tiradores acribillan con armas largas de precisión al profesor Armando Acosta y Lara, exsubsecretario del Interior, quien muere, hieren a su esposa y a un agente policial de su custodia, cuando salían de su domicilio, y huyehn». Luego, «en las calles Francisco Plá y Nicolas Herrera las FFCC detienen una camioneta que huye, iniciando entonces sus ocupantes la retirada a pie, cubriéndose con fuego de armas largas y cortas, que es repelido por las autoridades, muriendo dos sediciosos y resultando uno herido y otro ileso». «La Policía allana la finca de la calle Amazonas Nº1440, sus ocupantes desacatan la orden de arresto y abren fuego, el que es repelido, muriendo dos sediciosos y resultando uno herido y otro ileso». Luego, «es allanada otra finca sita en la calle Pérez Gomar Nº 4292, produciéndose un intenso tiroteo en el que mueren los sediciosos Jorgen Candán Grajales, Horacio Carlos Rovira Griecco, Gabriel María Schroeder Orozco y Armando Hugo Blanco Katraz, siendo capturados otros cuatro». «En ambos allanamientos se incautan $305.000 moneda nacional , y 29.420 dólares( lo que totaliza 29.960 dólares) y copiosa documentación del MLN-T». Se reporta también la captura del dirigente del MLN-T Juan Almiratti Nieto, fugado el 26 de mayo de 1971 de un local judicial. El Poder Ejecutivo ese mismo día solicita anuencia al Poder Legislativo para suspender la seguridad individual y decretar el estado de guerra interno (lo que ocurrirá al día siguiente y por 30 días) ante la conmoción pública generada por los asesinatos. El Parlamento otorga anuencia para suspender la seguridad individual y para decretar el estado de guerra interno por igual término.