En un innovador enfoque terapéutico, los médicos de Neuchatel, Suiza, han comenzado a prescribir visitas a museos, jardines públicos y galerías de arte como parte del tratamiento para pacientes con problemas de salud mental y enfermedades crónicas. Este proyecto piloto, lanzado el mes pasado, tiene como objetivo ayudar a los residentes a mejorar su bienestar emocional y físico a través del contacto con el arte y la naturaleza.
Patricia Lehmann, una de las médicas participantes en el programa, explicó que las actividades culturales ofrecen a los pacientes un respiro, permitiéndoles desconectar temporalmente de sus preocupaciones y dolencias. «Es una oportunidad para redescubrir la alegría y fomentar un camino hacia la sanación», comentó Lehmann.
Como parte del proyecto, se repartirán 500 recetas para visitas gratuitas a cuatro lugares emblemáticos de la ciudad, incluidos tres museos y el jardín botánico. Una de las beneficiarias fue una mujer de 26 años, afectada por el síndrome de desgaste profesional, quien destacó el impacto positivo que las visitas al Museo de Arte e Historia le brindaron: «Creo que aporta un poco de luz a la oscuridad».
La iniciativa tiene sus raíces en un estudio de la Organización Mundial de la Salud de 2019, que subrayó el papel crucial de las artes en la promoción de la salud. Durante los confinamientos por la pandemia del COVID-19, el cierre de los museos y espacios culturales afectó el bienestar de muchas personas, lo que motivó a las autoridades locales a replantear el papel de la cultura en la salud pública.
El proyecto se llevará a cabo durante un año y podría ampliarse a otras actividades culturales, como el teatro. Si tiene éxito, los responsables esperan que este enfoque sea reconocido como una forma válida de terapia, e incluso que el seguro médico pueda cubrir la cultura como parte del tratamiento.
