En concreto, tal y como han publicado los investigadores en la revista ‘Free Radical Biology and Medicine’, la evaluación inicial se realizó en modelos más simples, y luego se probaron los compuestos que tenían un efecto positivo en el modelo de tejido neural 3D.
Ese modelo se crea utilizando una esponja de seda no reactiva sembrada con células de piel humana que, a través de la reprogramación genética, se convierten en progenitores de células madre neurales. Esas células crecen y pueblan la esponja, lo que permite la formación de una red 3D de neuronas similar a lo que ocurre en el cerebro humano.
La pantalla inicial encontró que cinco compuestos tenían una «prevención realmente sólida de estas placas». Además, los expertos encontraron que la curcumina de la cúrcuma, el medicamento para la diabetes metformina y un compuesto llamado citicolina evitaban la formación de placas y no tenían efectos antivirales.
No obstante, los expertos han avisado de que los efectos en el laboratorio no siempre se traduce necesariamente en lo que lo que se puede ver en un paciente. Aún así, el descubrimiento es significativo porque no existe una cura para el Alzheimer o una forma de prevenir su progresión, aparte de varios medicamentos potenciales desarrollados por compañías farmacéuticas que aún están en pruebas.