El mundo del jazz perdió a uno de sus más grandes exponentes. Jack DeJohnette, legendario baterista, pianista y compositor, falleció a los 83 años. Nacido el 9 de agosto de 1942 en Chicago, Illinois, Jack DeJohnette creció inmerso en un vibrante entorno musical, donde el jazz, el blues y el R&B resonaban en las calles. A los 4 años comenzó a tocar el piano, demostrando un talento precoz, pero a los 13 encontró su verdadera vocación en la batería. Influenciado por la rica escena musical de su ciudad natal, estudió con maestros locales y debutó profesionalmente en su adolescencia, sentando las bases de una carrera que redefiniría los límites del jazz.
DeJohnette no era solo un baterista; su versatilidad lo llevó a dominar el piano y a componer obras que fusionaban géneros con una creatividad desbordante. Su estilo, caracterizado por una precisión relajada, un rango dinámico excepcional y una capacidad única para impulsar la improvisación, lo convirtió en un músico codiciado por los mejores del género.
La trayectoria de DeJohnette es un mapa de los momentos más icónicos del jazz moderno. En los años 60, se unió al cuarteto de Charles Lloyd, donde su batería virtuosa captó la atención internacional. Sin embargo, fue su colaboración con Miles Davis entre 1969 y 1972 la que lo catapultó a la inmortalidad. Como parte de la banda eléctrica de Davis, DeJohnette contribuyó a álbumes seminales como Bitches Brew (1970), Jack Johnson (1971) y On the Corner (1972), que marcaron el nacimiento del jazz fusión y expandieron los horizontes del género.

