La deflagración -cuyo origen investiga la Dirección Nacional de Bomberos- que se produjo en el piso 3, dañó varios apartamentos del mismo edificio y al menos una decena de construcciones aledañas, incluido el club Biguá. Marcos de ventanas, vidrios, restos de muebles y escombros, volaron por los aires y quedaron esparcidos sobre el césped de la plaza frente al edificio. «Voló todo», dijo una aturdida vecina del piso 7 del edificio sinestrado. La peor parte la llevaron el piso 4 y el 2, además del 3, con daños estructurales severos. Todo comenzó este viernes pasada la hora 9. Un estruendo estremeció la tranquila jornada de viernes. Varios videos de cámaras de seguridad, muestran la violencia del estallido. En realidad, no habría sido uno sino varias explosiones encadenadas, según las primeras evaluaciones. La onda expansiva de la explosión, que habría alcanzado un área de hasta nueve cuadras -aproximadamente-, hizo temblar la estructura de varios edificios linderos y tuvo llamas y una importante concentración de humo localizada en el tercer piso. El hecho provocó un efecto inmediato que movilizó a toda la zona y tanto a particulares como a entidades públicas y a prestadores de servicios de salud. Desde los habitantes de los apartamentos, pasando por vecinos y transeúntes hasta personas que llegaron al lugar por tener vinculo con quienes residen en ese edificio. La Policía, bomberos, emergencias móviles y servicio de SAME 105, fueron los que más rápido tuvieron que acomodarse a los acontecimientos y sus consecuencias, las cuales pudieron ser mucho peor. Bomberos evacuaron el edificio y los aledaños para preservar la integridad física de las personas. Luego de los primeros trabajos realizados por los diferentes equipos de Bomberos, Policía de Montevideo, emergencias médicas y SINAE, el equipo de peritaje de Bomberos comenzó a coordinar con los arquitectos e ingenieros de la Intendencia de Montevideo para determinar cuáles eran los próximos pasos a dar.Además, un helicóptero del Ministerio del Interior llegó minutos después, y para obtener información de primera mano, llegó el ministro del Interior, Luis Alberto Heber, la intendencia de Montevideo, Carolina Cosse, el jefe de la Dirección de Bomberos Ricardo Riaño, el vocero de Bomberos, Pablo Benítez y otras autoridades de la Policía, quienes recorrieron la zona, a los efectos de recabar información y datos para analizar lo sucedido.
Acerca de lo acontecido, Carolina Cosse manifestó en el lugar a los medios en rueda de prensa que «La Intendencia está desde el primer momento. La intendenta estuvo temprano por la mañana en el lugar y luego volvió sobre las 17 horas. «Cuando terminen las pericias y estemos habilitados vendrán todos los equipos de limpieza», dijo la intendenta de Montevideo, y aclaró que primero se pretende realizar «una evaluación estructural seria».
«Lamento el tremendo hecho ocurrido hoy frente al Parque Villa Biarritz. Quiero reconocer la labor de todos los equipos que participaron hoy: personal de Policía, bomberos, de la salud, el Club Biguá, vecinas y vecinos que se acercaron, entre otros», escribió después en un twitter.
De acuerdo a lo informado en el transcurso de la tarde por el Ministerio del Interior y la Dirección Nacional de Bomberos, en este sábado, los equipos trabajarán en la remoción de escombros y objetos del segundo y tercer piso del edificio para posteriormente apuntalar la estructura de ambas unidades. La losa del tercer piso está particularmente dañada y perforada, por lo que puede existir un inminente desprendimiento; también están comprometidos el segundo y el cuarto.
El edificio del epicentro de la explosión se clausuró en su totalidad, al tiempo que del lindero (por calle Hidalgo), se clausuró el tercer piso y se permitió el ingreso controlado, piso a piso, de los moradores de los apartamentos no clausurados. El personal del Departamento de Arquitectura y de Investigación de Siniestros, ambos de Bomberos, y personal de Seguridad Edilicia de la Intendencia continúan valorando los demás edificios, ya que la onda expansiva afectó a, por lo menos, a siete edificios en diferentes niveles.
Sobre la hora 18 de ayer, el ministerio del Interior avisó además que los Bomberos continúan utilizando un escáner a fin de descartar alguna víctima en edificio afectado.Por su parte, AndrésFernández, director de seguridad edilicia de la Intendencia de Montevideo, dijo anoche a Subrayado que en principio no hay peligro de derrumbe, y que los edificios linderos están operativos con seguridad. Además, agregó que hasta que el edificio afectado no reciba los trabajos necesarios en el pilar, el mismo no puede ser ocupado.
Respecto a los lesionados, la información actualizada es que hay tres personas en el Centro de Terapia Intensiva (CTI) -un hombre de 88 años internado en el Centro Nacional del Quemado y una mujer de 79 años a la espera de ser traslado al mismo centro y también otra mujer de 78 años será operada mañana en el Hospital Británico. En tanto, en la lista de personas lastimadas se contabilizan a cuatro con lesiones leves en observación en Emergencias y otras cuatro con lesiones leves -fueron dados de alta en el lugar-. De las tres personas, al momento de la explosión, una se encontraba en el tercer piso, y la restante en el segundo, de acuerdo a lo informado por la Policía.
La Jefatura de Policía de Montevideo dispuso una presencia policial permanente en la zona, tanto con patrullaje a pie como vehicular. Además, la Intendencia de Montevideo dispuso que este sábado no se instale la tradicional feria en esa zona. Por este fin de semana, la misma se arma en el Parque Rodó.En este caso trabajó una dotación de Bomberos de cuartel Centenario y cuartel de Carrasco, efectivos policiales de la Seccional 10ma, equipos médicos y personal de la Intendencia.
Producto de lo acontecido, la gran mayoría de las personas y familias que residen en el edificio que sufrió la explosión, con la autorización debida de los Bomberos y de la Policía, se fueron retirando en horas de la tarde – noche de ayer. Además, sobre el final de la jornada, en los edificios linderos que se vieron afectados por el incidente, se realizaron tareas de limpieza (recoger los vidrios de la zona) y también vidrieros trabajando para colocar cristales y aberturas en las edificaciones.
Sobre el final de la tarde, el Ministerio del Interior realizó un balance de lo ocurrido y actualizó la cifra de heridos:
Víctimas
Respecto a los lesionados, la información actualizada es la siguiente:
Tres en CTI: un hombre de 88 años y una mujer de 79 años, ambos internados en el Cenaque, una mujer de 78 años que será operada este sábado en el Hospital Británico.
Otras cuatro personas con lesiones leves en observación en Emergencias.
Cuatro personas con lesiones leves dados de alta en el lugar.
Redes
Con el paso de los minutos y las horas, las redes sociales (principalmente Twitter y Facebook), se llenaron de testimonios de lo sucedido, pero principalmente de fotos y vídeos que fueron grabados tanto en la zona en la que se encuentra ubicado el edificio, como también en las adyacencias al mismo. Por otro lado, las imágenes y filmaciones publicadas por los medios de comunicación, se fueron propagando y diseminando rápidamente, por lo que gran parte de la información circuló con mucha rapidez.
A qué hora, dónde, por qué
La explosión tuvo lugar apenas pasados 11 minutos de las 9 de la mañana. El origen del foco fue en el tercer piso y afectó principalmente hasta el sexto nivel de la construcción. Se estima que la explosión en el apartamento del tercer piso se debió a una fuga de gas, pero las pericias de Bomberos serán las que determinen con exactitud el origen de lo sucedido.
Un pilar del edificio bajo la lupa
Por más violenta y destructiva que resultó la explosión de esta mañana en Punta Carretas, el edificio «aguantó» y «nada indica» que vaya a colapsar. Esto lo afirmó el arquitecto Andrés Fernández, director de la Unidad de Seguridad Edilicia de la Intendencia de Montevideo.
«Fue muy, muy importante la explosión. En mi experiencia nunca lo había visto», dijo Fernández, y ratificó que el origen estuvo en el tercer piso y que «todo indica» estuvo vinculado a una pérdida de gas.
La «onda expansiva», explicó, «sale por los lugares débiles» y el edificio contaba con una gran fachada de vidrio, que permitió que «gran parte de la onda se perdiera».
El principal problema estructural es que «un pilar del edificio, si bien no está dañado ni fue afectado por la explosión, está trabajando de una forma para la que no fue dimensionado». «Está trabajando para tres veces la altura de lo que fue construido. Es una situación de riesgo aunque nada indica que vaya a colapsar», aclaró.
Por esto, la IM evacuó e inhabilitará el uso del edificio por un periodo aún no determinado.
