El narcotraficante uruguayo Sebastián Marset continúa siendo buscado en Bolvia y se conocieron más detalles sobre su vida en ese país.
En Uruguay, el Presidente Luis Lacalle Pou dijo ayer que Uruguay tenía conocimiento de que Marset estaba en Bolivia. «Dentro de lo que les puedo contar, porque hay estrategias de seguridad compartidas, se informó entre los gobiernos de Uruguay, Bolivia y Paraguay hace un tiempo que se tenía el dato de que estaba en Bolivia» sostuvo en diálogo con la prensa.
Aclaró que el pedido de captura es de Paraguay «pero tenemos particular interés en que se detenga. Ha habido colaboración. Veremos la actuación de la Policía de Bolivia». Por su parte el Ministro del Interior, Luis Alberto Heber indicó que “desde hace meses estamos en contacto hace meses con el ministro del Interior de Bolivia y de Paraguay coordinando acciones» agregando “no damos por fracasada esta misión, y espero que lo puedan capturar en estos días”.
En medio de estas declaraciones en Uruguay se conocieron ayer diferentes videos de Marset como integrante de un cuadro de fútbol del cual era el dueño. Se ha señalado que dichos videos desde hace meses circulan por las redes sociales. Su pasión por el fútbol lo llevó a que a pesar de que sobre el existiese una orden de captura de Iiterpol creó «Los Leones El Torno Fútbol Club», el cual competía en la Primera A de la Asociación Cruceña de Fútbol (ACF). Los partidos están en Youtube ya que eran trasmitidos por la televisión local.
Hay dos jugadores de fútbol uruguayos detenidos en Bolivia por este caso. Se trata de Christian Latorre y Lucas Casavieja, este último integrante del club de Marset.
Persiguiendo a Marset
El Bolivia continúan tras Marset. Antes de su detención un testigo de la zona lo vio salir de uno de sus ocho domicilios, junto a su familia y varias bolsas de plástico. Se fueron caminando a una hora que iniciaran los controles y operativos policiales en su contra.
El fiscal departamental de Santa cruz, Roger Mariaca, informó este lunes que se conformó una comisión de fiscales para investigar el caso del narcotraficante uruguayo.
El narcotraficante ingresó a Bolivia en septiembre del año pasado junto a su esposa y sus tres hijos menores de edad. Marset Cabrera cuenta con «múltiples identidades» al extremo que se hacía pasar por brasileño, paraguayo y boliviano, algo que le sirvió para eludir a las autoridades que lo buscan.
La Policía la noche del domingo ejecutó ocho allanamientos de diferentes inmuebles, viabilizando el secuestro de marihuana, 31 vehículos, 17 armas de grueso calibre, 28 cargadores de diferentes armas y chalecos antibala. El jefe nacional anticrimen de Bolivia, coronel Douglas Uzquiano, exhortó a Marset a que se entregue, porque de lo contrario estará siempre escapando. «En cualquier momento vamos a dar con esta persona», agregó.
Problemas políticos
Pero esta fuga está teniendo consecuencias en Bolivia. En conferencia de prensa, el presidente de la Cámara de Senadores de Bolivia, Andrónico Rodríguez, expresó su preocupación por el caso, considerando que se ha burlado la inteligencia de los servicios de seguridad de Bolivia.
«Es evidente que se ha tenido que burlar la Inteligencia de nuestro país, parte de las instancias que corresponden. ¿Cómo es posible que (Marset) esté en el país y, a estas alturas, después de tanto tiempo, se pueda identificar este hecho?», afirmó.
“Tendrán que explicar las instancias que correspondan, sin duda, este hecho preocupa a todos los bolivianos y esperemos que sea frontal la lucha contra el narcotráfico en nuestro país”, señaló Rodríguez.
El diputado de la oposición Renán Cabezas fue aún más lejos, argumentando que en el país “hay fuerzas extrañas que están encubriendo al narcotráfico”, haciendo alusión directa al Ejecutivo nacional, especialmente al ministro de Gobierno (Interior), Eduardo Del Castillo.
Por su parte, el viceministro de Defensa Social y Sustancias Controladas, Jaime Mamani, señaló esta mañana que la información sobre la presencia de Marset en Santa Cruz llegó a manos de la Policía hace apenas un mes, lo que llevó a designar a un equipo de Inteligencia para dar con el paradero del narcotraficante. Sin embargo, las operaciones de la Policía se vieron frustradas cuando la «seguridad» de Marset descubrió sus actividades, permitiéndole a él y a su familia escapar.
