Movilidad eléctrica en Uruguay: sus avances significativos en los últimos años

El primer vehículo eléctrico se compró en 2014.

En los últimos años, el mundo ha ajustado la mira que tenía puesta en temas ambientales, forjando un camino hacia energías renovables que Uruguay decidió recorrer, implementado políticas para transformar su matriz energética y logrando así que en 2023 el 92% de la matriz provenga de fuentes de origen renovable, pero las acciones no quedaron allí, sino que en 2015 el país dio un paso importante iniciando su proceso de transición en movilidad al incorporar vehículos eléctricos a sus flotas, recordemos que el transporte es el segundo sector de mayor consumo energético y el principal consumidor de derivados del petróleo en nuestro país.

La transición eléctrica en el transporte público dio sus primeros pasos durante la misma época en la que se adquirieron los primeros vehículos eléctricos particulares, la puesta en marcha de los primeros cuatro taxis eléctricos ocurrió a comienzos del 2015 en Montevideo con la marca BYD y para el 2017 se sumaron 20 más, marcando el inicio de un constante crecimiento y alcanzando en el 2024 una flota de 140 taxis eléctricos en circulación con autonomía mínima de 200km y a la espera de la incorporación de 85 más. En 2023 emigró el primer taxista a eléctrico en el departamento de Florida, siendo este el segundo departamento en sumarse a la modalidad.

Siguiendo por este camino, circuló por las calles de la capital en el año 2016 el primer ómnibus 100% eléctrico, tras la concertación de un acuerdo de compra de una unidad entre Cutcsa y BYD Auto. Iniciativa en la que se venía trabajando desde el 2013, cuando UTE y la empresa automotriz firmaron un convenio en el que se acordó la realización de pruebas de campo. Este fue el inicio de lo que hoy para la empresa de transporte significa un total de 21 ómnibus eléctricos operativos (en las líneas CE1, E14 y DE1) y se espera la llegada de más unidades, debido a que en 2022 se comprometieran a no renovar más la flota con coches a gasoil y solo incorporar vehículos eléctricos hasta lograr una unidad 100% eléctrica. En ese marco la empresa cerró acuerdos con BYD y Higer para la adquisición de unos 200 vehículos más que llegarían en tandas entre este año y el entrante.

Durante el 2017, con la financiación del Fondo para el Medio Ambiente Mundial, se creó el programa de movilidad eléctrica: MOVÉS, con el fin de promover un “sistema de movilidad sostenible, bajo en carbono, eficiente e inclusivo”. Este se ejecutó bajo la asociación del Ministerio de Industria, Energía y Minería (MIEM), con el Ministerio de Ambiente (MA) y el Ministerio de Vivienda y Ordenamiento Territorial (MVOT) y cuentan la colaboración de la Agencia Uruguaya de Cooperación Internacional (AUCI). Con el objetivo de sumar esfuerzos e impulsar políticas conjuntas de transporte eficiente, se creó el Grupo Interinstitucional de Eficiencia Energética en el Transporte, a los que se le sumaron otras entidades como el Ministerio de Transporte y Obras Públicas (MTOP), la Unidad Nacional de Seguridad Vial (UNASEV), UTE, ANCAP y la Intendencia de Montevideo.

Corriendo el año 2020 el sistema de transporte público contaba con 30 nuevos ómnibus eléctricos, de los cuales 20 (BYD) se incorporaron a Cutcsa, 4 en COETC (Yutong), 3 en UCOT (Yutong) y 3 en COME S.A. (Yutong). En 2021 se sumaron dos vehículos más en el departamento de Canelones por la Compañía de Ómnibus del Este (CodelEste) y a principios del 2024 UCOT sumó 6 ómnibus, COETC adquirió 9 y la empresa COME S.A. otros 5, que se unen a los adquiridos anteriormente. En total por la capital recorren 51 ómnibus 100% eléctricos, evitando en dos años, gracias a este proceso, más de 1.473.000 litros de consumo de combustible y la emisión de 3.888 toneladas de CO2.

Las acciones no se quedan acá, más departamentos se van sumando a esta iniciativa, en el año 2022 el MIEM creó el programa Subite con el objetivo de promover la incorporación de la movilidad eléctrica en todo el territorio nacional, en ese marco en 2023 los departamentos de Flores, Salto y Maldonado adquirieron un ómnibus eléctrico y el departamento de Tacuarembó 2 y a principios de este año le dieron la bienvenida a una unidad los departamentos de San José, Artigas y Río Negro. A su vez, el programa otorgó incentivos económicos para la incorporación de 100 vehículos eléctricos en actividades de transporte público de uso intensivo, que incluyen taxis, aplicaciones y remises en todo el país.

Durazno, no se quedó atrás por parte de la empresa Nossar sumó a su flota dos unidades eléctricas de la Ankai y hasta ahora solo hemos recopilado lo que se ha hecho en materia de transporte público. Poco a poco se van viendo por las calle del país más vehículos eléctricos y el surgimiento de nuevos proyectos innovadores para fomentar esta transición, por ejemplo Quantik Lab (el centro de innovación de la empresa uruguaya Quantik) y Newlab (un centro tecnológico multidisciplinario con sede en Nueva York, Estados Unidos) desarrollaron un programa que destinado a quienes prestan servicio de reparto a través de plataformas, para que puedan cambiar las motos de combustión interna por las eléctricas con baterías intercambiables. Incluso esta movilidad eficiente y sostenible avanza hacia otros sectores como el Náutico donde el ingeniero mercante y licenciado en Sistemas Náuticos, Julio Acosta y el estudiante avanzado de Ingeniería Naval, Márcelo Álvarez, diseñaron y desarrollaron la primera lancha eléctrica en Uruguay.

¿Sabías que el primer vehículo eléctrico lo compró UTE? En el año 2014 la empresa estatal tomó la decisión de integrar esta tecnología en su flota llegando así los primeros vehículos eléctricos a Uruguay. Ante esta iniciativa y junto a otras entidades del estado tomó medidas, como exoneraciones fiscales, para fomentar y apoyar la compra de vehículos eléctricos manteniéndose únicamente el IVA, debido a su alto coso de compra, y desde entonces se abrió un nuevo mercado en el país.

En lo que respecta al uso diario y cotidiano, el país logró posicionarse en la adopción de vehículos eléctricos entre sus ciudadanos. Según datos de la Asociación del Comercio Automotor (ACAU) en los últimos 3 años Uruguay registró un aumento importante en la venta de autos eléctricos.  Durante el año 2021 se registraron 245 operaciones de compra de vehículos eléctricos, pero ya para el 2022, las ventas ascendieron en un 315%, contabilizando un total de 1,016 transacciones y en el 2023 el mercado registró la compra de 1,841 unidades eléctricas. Este recorrido no solo superó la expectativa en resultados de ventas y aceptación del público, sino que demuestra que la movilidad eléctrica logra posicionarse de forma cada vez más rápida, en el primer semestre de 2024, las ventas sumaron 2,198 unidades, alcanzando y superando las del año anterior.

Puntos de carga

La incorporación de vehículos eléctricos requiere que se instalen Sistemas de Alimentación de Vehículos Eléctricos (SAVE) y la duda que surgía al tomar una decisión a la hora de comprar un vehículo se fijaba siempre en la cantidad de puntos de carga que en el país habían, pero y si bien como toda etapa inicial la cantidad de estaciones eran mucho menores que los puntos de carga tradicionales, entidades estatales y departamentales se fueron haciendo responsables de las inversiones en infraestructura para la creación de estos puntos, además se generó una fusión entre el rubro petrolero y eléctrico, donde las estaciones de servicios tradicionales optaban por incorporar un SAVE, alcanzando que en el primer semestre del 2024 una ruta eléctrica nacional con 317 puntos de carga, de los cuales 102 son de corriente continua y carga rápida, permitiendo completar el 80% en 20 minutos.

En 2018 Uruguay inauguró la primera ruta eléctrica de América Latina tras un trabajo en conjunto entre UTE y Ducsa, que contaba con una extensión de 300 km y permitía viajar desde Colonia a Maldonado asegurando 6 puntos de carga; en 2023 UTE se propuso el objetivo de contra con un cargador eléctrico cada 50km de distancia para el 2025, para acompañar el crecimiento de vehículos eléctricos que presenta el país. Actualmente los 19 departamentos cuentan con al menos un SAVE y se espera que esta red siga creciendo.

Si bien la adquisición de un vehículo eléctrico significa un presupuesto mayor comparado con un vehículo de combustión tradicional, se ha demostrado que los gastos que suponen su uso son significativamente menores, debido al costo de carga y de service o reparaciones. Además, hoy ya no significa un problema los puntos de carga.

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