La Justicia condenó en las últimas horas a un joven de 25 años de edad luego de que se le encontrara culpable del homicidio de un hombre de 48 años, quien era su expadrasto, a quien asesinó el 18 de junio en Santa Catalina.
El hecho ocurrió cuando la víctima salía de realizar trabajos de albañilería en un parador de Santa Catalina y se dirigía a la parada de ómnibus.
En ese momento, el ahora condenado lo abordó y le disparó en múltiples oportunidades, ocasionándole la muerte.
La investigación del hecho apuntó al joven con antecedentes por rapiña como autor del crimen y este martes los agentes de la Zona Operacional IV de la Jefatura de Policía de Montevideo lo detuvieron. Al momento de su aprehensión las autoridades le incautaron la pistola 9 milímetros con la que cometió el crimen, así como una escopeta y un fusil.
La pesquisa determinó que el asesino se crió con su víctima, pues este fue pareja de su madre durante varios años. Ambos eran adictos a las drogas y tenían enemistad desde hacía larga data.
Finalmente, lo que colmaría la mala relación fue que la víctima comenzó a rapiñar en la zona y los vecinos comenzaron a reclamarle a la madre del homicida por ser expareja del ladrón.
Finalmente, al tirador lo condenaron por el delito de homicidio en reiteración real con uno de receptación y deberá cumplir condena de siete años y ocho meses de cárcel.