Francisco beatificará a Juan Pablo I en la plaza de San Pedro este domingo 4 de septiembre, por lo que se convertirá en el quinto Papa del siglo XX que llega a los altares, después de Pío X, Juan XXIII, Pablo VI y Juan Pablo II. Francisco aprobó en octubre del año pasado el milagro necesario para la beatificación de Juan Pablo I, cuyo pontificado duró tan solo 33 días, uno de los más breves de la historia lo que provocó que el año 1978 (cuando fue elegido) estuviera marcado por tres sucesores de Pedro.
El milagro aprobado por Francisco (paso necesario para la beatificación) es la curación extraordinaria de una niña argentina de once años que padecía una forma grave de encefalopatía.
Juan Pablo I fue el primer Papa nacido en el siglo XX y también el último en morir en dicho siglo. Asimismo, es el último pontífice italiano hasta la fecha y el último de una larga sucesión ininterrumpida de papas italianos a lo largo de más de cuatro siglos, iniciada con Clemente VII en 1523. Tras su muerte repentina, le sucedió el cardenal polaco Karol Wojtyla, que adoptó el nombre de Juan Pablo II. Fue declarado Siervo de Dios por su sucesor, Juan Pablo II, el 23 de noviembre de 2003, el primer paso en el camino a la santidad. Francisco confirmó sus virtudes heroicas el 8 de noviembre de 2017 y le proclamó Venerable.