En la República Popular de China, la Gran Muralla y el Gran Canal, son motivo de orgullo nacional. El Gran Canal, en particular, es considerado un símbolo de logros culturales e históricos, debido a su tamaño y grandeza.
Durante la visita al distrito de Tongzhou en Beijing, Diario La R tuvo la oportunidad de recorrer parte del Gran Canal construido en 486 a.C por trabajadores de la antigua China; siendo este, el canal más antiguo y grande del mundo. A su vez, es considerada la obra de ingeniería más vasta del planeta, antes de la Revolución Industrial.
Este canal se divide en tres partes, el Gran Canal de las dinastías Sui y Tang, el Gran Canal de Beijing-Hangzhou y el Gran Canal del Este de Zhejiang. El mismo, atraviesa 8 provincias y municipios; entre ellas Beijing, Tianjin, Hebei, Shandong, Henan, Anhui, Jiangsu y Zhejiang. Cuenta con una longitud de casi 1.800 kilómetros y conecta los cinco principales sistemas hidráulicos, entre los cuales se incluyen el río Haihe, el río Amarillo, el río Huai, el río Yangtze y el río Qiantang.
Un dato curioso, es que, en China, la gran mayoría de los ríos principales corren de oeste a este, siendo el Gran Canal, el único que atraviesa el país de norte a sur, logrando conectar los ríos con el mar.
Con más de 2.500 años de historia, el Gran Canal forma parte de la Lista del Patrimonio de la Humanidad desde 2014, teniendo un gran valor de transporte, riego y drenaje. Por otra parte, fue una vía de transporte de alimentos sumamente importante durante muchas dinastías, desempeñando un papel significativo en los intercambios económicos y culturales entre el norte y el sur de China.
El Gran Canal se estableció como una vía de transporte utilizada tanto por embarcaciones estatales como por mercaderes particulares. Este hecho se evidencia en la implementación de seis peajes entre Beijing y Nanjing a partir de 1429, los cuales no sólo controlaban el tránsito del impuesto en grano, sino que también evaluaban los bienes privados. Así, el Gran Canal posibilitó el comercio privado entre el norte y el centro de China, fomentando la formación de redes comerciales en la región central del país.
Emperadores clave en su construcción y desarrollo:
Qin Shi Huang (259-210 a.C.), primer emperador de la dinastía Qin, fue el promotor inicial de la idea de unificar China mediante infraestructuras, aunque el canal no se materializó en su época. Posteriormente, Wen-Yang Jian (Dinastía Sui, 581-618), inició la construcción del canal en el siglo VII e implementó el Sistema de Examen Imperial para seleccionar funcionarios por mérito, sentando las bases de la administración china. Hacia el 609, el Emperador Yang de la Dinastía Sui, completó el canal, pero sus costosas campañas militares (como las guerras en Corea y Vietnam) provocaron revueltas que llevaron al colapso de la dinastía Sui.
Años más tarde, durante la Dinastía Tang (618-907), se utilizó el canal para inspecciones imperiales cada cinco años, reforzando el control central y el transporte de mercancías como carbón y madera. Llegada la Dinastía Qing (1644-1911), emperadores como Kangxi y Qianlong, realizaron giras de inspección por el canal, promoviendo la unidad cultural, técnicas agrícolas y consolidando su autoridad. Estas visitas también difundieron el budismo y estandarizaron los exámenes imperiales.
Esto demuestra que el Gran Canal no solo fue una hazaña de ingeniería, sino también un eje de unidad política, económica y cultural, impulsado por emperadores visionarios y mantenido a lo largo de milenios.
Actualidad
A diferencia de otros canales, el Gran Canal sigue desempeñando múltiples funciones de transporte naval, hidráulica, ecológica y cultural. Hoy en día, China promueve vigorosamente la gestión y protección del sistema hidráulico para poder reparar el entorno ecológico circundante, con la protección del panorama histórico de ciudades y poblaciones famosas a lo largo del canal, se cuenta con una gran diversidad de excursiones que lo recorren, así como la realización de diversos festivales.
Algunas de las actividades que se pueden realizar, es la visita al Museo del Gran Canal, el Pabellón de Demostración de Artesanía de Hangzhou, recorrer el Parque de Reliquias del Ferrocarril de Jiangshu, el Templo de Xiangji, así como el Museo de la Historia Natural y el de Ciencia y Tecnología. El Parque del Gran Canal, se encuentra cerca de la orilla de este y es un lugar ideal para paseos tranquilos, con amplias zonas verdes y espacios de relajación. A su vez, hay caminos que bordean el canal, perfectos para caminar o andar en bicicleta.