Centenares de personas, muchas de ellas mujeres, se manifestaron este sábado en Washington para exigir al Tribunal Supremo de Estados Unidos que mantenga la protección constitucional al aborto, ante el temor de que los magistrados la anulen próximamente.
El juez conservador Clarence Thomas admitió esta semana que la Corte Suprema de Estados Unidos cambió a raíz de la sorpresiva filtración de un borrador de opinión a principios de este mes. La opinión apuntaba que el máximo tribunal del país estaba dispuesto a anular el derecho al aborto reconocido hace casi 50 años por el caso Roe vs. Wade.
Thomas, quien se unió al tribunal en 1991 y que desde hace mucho tiempo ha pedido que se revoque ese fallo histórico, describió la filtración como un impensable abuso de confianza. “Cuando pierdes esa confianza, especialmente en la institución en la que estoy, la institución cambia fundamentalmente. Empiezas a mirar por encima del hombro. Es como una especie de infidelidad que puedes explicar, pero no puedes deshacerla”, dijo en una conferencia el viernes por la noche en Dallas.
El tribunal ha dicho que el borrador no representa la posición final de ninguno de sus miembros, mientras que el presidente de la Corte Suprema, John Roberts, ordenó una investigación sobre la filtración.
Thomas, quien fue nominado por el entonces presidente George H.W. Bush, dijo que antes de la filtración de la opinión el 2 de mayo al medio periodístico Politico, estaba más allá de “la imaginación de cualquiera” que se publicaría por adelantado incluso una línea de un borrador de opinión, mucho menos un borrador completo de casi 100 páginas.
Politico también reveló que, además de Thomas, los jueces conservadores Neil Gorsuch, Brett Kavanaugh y Amy Coney Barrett votaron con el autor del borrador de opinión, Samuel Alito, para anular el fallo Roe vs. Wade y una decisión de 1992, Planned Parenthood vs. Casey, que reafirmó la conclusión del fallo Roe vs.
Wade, del derecho constitucional al aborto.
Thomas dijo que antes de la filtración, “si alguien hubiera dicho que se podría filtrar una sola línea de una opinión”, la respuesta habría sido: “Oh, eso es imposible. Nadie haría eso jamás”. “Ahora esa confianza o esa creencia se han ido para siempre”, dijo Thomas durante la Old Parkland Conference.