El presidente de la federación comienza diciendo que se espera de la instalación de la carpa frente al Palacio Legislativo cuando se retoma la discusión parlamentaria de la reforma de la seguridad social propuesta por el gobierno. «Desde ahí estaremos, las organizaciones de campo social, denunciando a la opinión pública los aspectos negativos de esta reforma que se pretende imponer, una reforma absolutamente injusta que responde a los intereses de clase que defiende el actual gobierno». A propósito de esto último recordó declaraciones recientes de autoridades de gobierno, precisamente del ministro Fernando Matto, titular del MGAP, en su discurso en la inauguración de la «Expoactiva» de Soriano donde afirmó «el malla de oro sigue de pie», esto a su entender «deja explícito una vez más que sector de la población es prioridad para el gobierno, no lo es la población que menos tiene, ni son aquellos que sostienen el país con su trabajo; la reforma no es más que el reflejo de una misma visión de país».
Se espera que la carpa sirva como escenario y plataforma «para activar y difundir» a través de charlas, mesas redondas, debates y también de actividades culturales. El centro de las actividades de las organizaciones va a estar nucleadas en torno a la carpa instalada al borde de la Plaza 1º de Mayo, a modo de ejemplo la Mesa Nacional de la Intersocial se reúne hoy sábado a partir de las 10 de la mañana en el lugar.
Como también fuera anunciado el próximo 23 de marzo está convocado un paro general de actividades por 24 horas por parte del PIT-CNT que forma parte de las medidas de lucha contra la reforma de la seguridad social, que tendrá un cierre de jornada con un acto y concentración con la participación de todo las organizaciones del movimiento popular.
El presidente de la federación señala que desde el gobierno se dice que no existen propuestas alternativas desde los que se oponen a la reforma, «eso no es así, hay propuestas presentadas por el gremio de los trabajadores de MTSS, hay propuesta de los equipos en representación de los trabajadores, hay propuestas de los jubilados». Lo que sucede dice: «es que estas propuestas representan a los sectores sociales, populares, presentadas por los equipos que responden a los mismos y claramente van en contra de los intereses de los poderosos».
«No es posible aplazar la edad a la que se accede a la jubilación, no se pueden cambiar drásticamente y endurecer las condiciones por las que se accede a la prestaciones sociales, en un momento de la vida cuando son más necesarias, la pensión a la vejez, la pensión a la invalidez, a las enfermedades incapacitantes», afirma. En el mismo sentido afirma que todas las organizaciones están de acuerdo en que debe haber una reforma de la seguridad social y no una reforma jubilatoria, » que es en definitiva lo propuesto.
«Una verdadera reforma debe profundizar en los beneficios, por ejemplo al sistema de cuidados, a la niñez, a los trabajadores accidentados, entre otros y no simplemente enfocarse en lo que el gobierno llama el gasto», enfatiza. Sobre este punto, el de cómo se solventa el sistema, Enrique Cal nos dice que el Uruguay forma parte de un «triste grupo de países» donde la ecuación de los aportes de los trabajadores es del doble de lo aportado por su empleador, «es lamentable, esta reforma tiene su acento en el empeoramiento de las condiciones en que se accede a las prestaciones jubilatorias por parte de las trabajadoras y trabajadores».
Otros de los aspectos negativos señalados por la Intersocial es el rol que cumplen las AFAP, » no solamente no se las toca, sino además se mejoran las condiciones en las que intervienen en el mercado de las jubilaciones, más allá que se disminuye el interés de transferencia, se amplia a todo el universo de trabajadores, se hace obligatorio el aporte de parte de los trabajadores a una AFAP, lo cual es un disparate grande como una casa».
A su entender «no hay un solo país en el mundo que haga una evaluación positiva del sistema mixto de previsión social, aquí se tomó el modelo chileno como ejemplo y hoy están con un problema terrible», hay que entender «que el funcionamiento de las AFAP es totalmente especulativo, dentro de un sistema capitalista en donde el grueso de lo producido se lo llevan los capitales privados», sentencia.
Desde FUCVAM se dice que debe volverse a los ejes identitarios del sistema solidario uruguayo; «la universalidad, debe afectar a todos por igual, no puede ser que haya uruguayos que se jubilen a los 45 años cobrando el 130% de su último salario, como el caso de la caja militar. La solidaridad intergeneracional es otro pilar fundamental, hay que preocuparse por el ingreso de todos los trabajadores al sistema, por la generación de empleo de calidad, por el acceso del trabajo de los jóvenes y finalmente la participación activa, protagónica del Estado, no es posible asegurar un sistema que cada vez más quede librado a la especulación del capital, es necesario una evaluación profunda de los resultados de la experiencia de estos años con las AFAP.
