El ministerio de Desarrollo Social (Mides) no revocará su decisión de suspender las casi 800 asignaciones familiares del Plan Equidad que se cortaron en noviembre debido a que los menores no concurren a clases. Así lo confirmó este jueves el titular de la cartera, Martín Lema.
“Acá hay una señal que es clara y dijimos que no hay marcha atrás, es que si no se cumple con la contraprestación se suspende la prestación”, dijo.
En línea con esto, Lema explicó que en se trata de una minoría, con un total de 791 casos de las 380 mil familiares que reciben la asignación. El ministro indicó, además, que si no se regulariza la situación durante noviembre, el pago de la prestación se suspenderá a partir de diciembre. Esto significa que las familias dejarían de cobrar este beneficio desde enero del próximo año.
Durante una rueda de prensa realizada en el acto de lanzamiento de la carrera 5k del Instituto Nacional de Juventud (INJU), Lema explicó que no pueden darse «señales equivocadas».
Hipotecar el futuro
El titular del Mides apuntó a la necesdiad de que «efectivamente concurran (los niños) a los centros de estudios». «Si no, se hipoteca el futuro de muchísimos gurises», añadió.
«Nosotros no podemos dar la señal de que es lo mismo ir al centro de estudio que no», dijo Lema. No obstante, aclaró que tanto la cartera como la Administración Nacional de Educación Pública (ANEP) y el Banco de Previsión Social (BPS) trabajan para identificar las razones por las cuales tiene lugar este comportamiento.
El ministro indició que en el anterior control se registraron más de 11500 casos de incumplimiento. Sin embargo, más de 4000 casos regularizaron su situación.
«Después, hay que hacer un seguimiento. Mucho corresponde a ANEP porque es quien tiene el contacto directo con los menores», dijo el jerarca.