El kéfir, la bebida de moda, se convirtió en uno de los alimentos más completos y beneficiosos para la salud. Este superalimento, ya sea en forma de yogur o bebible, demostró tener efectos positivos en la digestión, el sistema inmunológico y la calidad del sueño.
Su origen es del este de Europa y suroeste de Asia (zona del Cáucaso) el kéfir, también llamado yoca, yogur de pajaritos, leche kefirada o búlgaros es una combinación de bacterias probióticas y levaduras en una matriz de proteínas, lípidos y azúcares. Sus nódulos tienen un aspecto similar al de la coliflor, pero es más blando y gelatinoso y están envueltos en una matriz polisacárida, denominada kefiran.
Pese a su antigüedad, en los últimos tiempos ganó la atención de los ámbitos científicos por sus potenciales aportes a la salud.
Existen tres clases: de leche, de agua y de té o Kombucha. Los tres tipos son producidos con la misma microflora, pero adaptados a medios distintos, por tantos los beneficios que nos aportan son los mismos.
Para qué sirve el Kéfir: propiedades
Depura el organismo: debido al alto poder desintoxicante, elimina radicales libres. Este efecto permite reducir el daño en el ADN, lo que explica su potencial antienvejecimiento y anticancerígeno.
Efecto probiótico: ayuda a equilibrar y regenerar parcialmente la flora intestinal. Además, ayuda en digestiones lentas y la correcta absorción de nutrientes.
Aportes dermatológicos: elimina toxinas de nuestro organismo, lo que lo convierte en un gran aliado ante problemas dermatológicos.
Mejora los síntomas de intolerancia a la lactosa: estudios que registraron una disminución de hasta el 30% en el contenido de lactosa en comparación a la leche sin fermentar.
Combate el síndrome del intestino irritable: investigaciones sugieren que consumir Kéfir de leche puede ayudar a restablecer el equilibrio digestivo e intestinal, lo que ayudaría a luchar contra enfermedades gastrointestinales como el síndrome del intestino irritable (SII), la enfermedad de Crohn y las úlceras.
Equilibra la glucosa en sangre: se realizaron ensayos clínicos en el que a adultos diabéticos se les da 600 cc de Kéfir por día durante 8 semanas, mostrando una disminución significativa en los niveles sanguíneos de glucosa y hemoglobina glucosilada en ayunas.
Propiedades antiinflamatorias: la actividad probiótica ayuda a disminuir la permeabilidad del intestino y a reforzar la mucosa intestinal. Esto evita que ingresen al cuerpo antígenos indebidos que sobre activen la respuesta inflamatoria del sistema inmune.